San Pedro Sula
La mala calidad del aire que se respira en la Capital Industrial, debido a los altos índices de contaminación, está afectando el rendimiento laboral de las personas y ha ocasionado que las enfermedades respiratorias sigan en aumento.
Diana Betancourt, experta en Saneamiento Ambiental, señaló que la capa de humo que se observa en el ambiente es un problema regional, que en Honduras se ha agravado debido a los incendios forestales y quemas de cultivos.
Explicó que la bruma que impide observar el imponente Merendón es una mezcla de humo y material particulado, generado por incendios, la quema y la creciente circulación de vehículos.
Indicó que estos niveles de contaminación tienen un impacto negativo en el rendimiento laboral de las personas, debido a que la exposición al material particulado genera complicaciones en las vías respiratorias y el corazón.
Para el caso, solo en el último mes, las atenciones por enfermedades respiratorias han crecido en un 25% en el hospital regional del IHSS, mientras que en el Mario Catarino Rivas se han duplicado en comparación con 2022.
Para Betancourt este reciente brote de enfermedades respiratorias y conjuntivitis son producto de la contaminación, “y una persona enferma no tiene el mismo desempeño laboral”.
Agregó que la mala calidad del aire, sumado a las altas temperaturas, también genera fatiga, tiene un impacto económico en los empleados y en su estado de ánimo. Para la experta es vital que tanto el Gobierno como las autoridades locales creen una estación ambiental que mida los niveles y fuentes contaminantes, así como hacer que se cumpla con las normativas ambientales.