25/04/2024
01:19 PM

En seis meses terminan obras del Canal Seco

La nueva carretera acorta la distancia para los transportistas en 118 km entre la Villa de San Antonio y El Amatillo; permite reducir el viaje en casi dos horas.

    TEGUCIGALPA

    El sueño de ver el Canal Seco terminado está a punto de cumplirse para Honduras, el histórico proyecto que desde hace años se construye en los departamentos de Comayagua, La Paz y Valle potenciará a Honduras como el centro logístico de la región a finales de 2021.

    El equipo periodístico de LA PRENSA recorrió los casi 100 kilómetros de la carretera desde la aduana de El Amatillo, en Goascorán, Valle, hasta llegar a la carretera CA-5 en la Villa de San Antonio, Comayagua.

    Antes del recorrido, LA PRENSA se comunicó con Inversión Estratégica de Honduras (Invest-H), encargados de finalizar la construcción de la carretera, para conocer cuál era el estado actual de la misma.

    3 claves de la carretera:
    1. Descripción. El Canal Seco con 96.20 kilómetros de una carretera de cuatro carriles, parte del Corredor Logístico hasta completar 386 kilómetros desde Goascorán, Valle hasta Puerto Cortés y su finalidad es tener una vía pavimentada entre las zonas sur, centro y norte del país.
    2. Beneficio. El proyecto fue concebido para aportar impactos socioeconómicos y ambientales. En la parte social, la generación de empleo durante la construcción, esta vía da ahorro en los costos de traslado de productos, incremento de competitividad.
    3. Actualidad. La mayoría de los tramos ya están habilitados y se espera que esta importante carretera esté totalmente finalizada el último trimestre de 2021.Producto de la construcción del Canal Seco, más negocios se han activado, entre llanteras, ventas de comida en la carretera, pulperías, etc.
    Invest-H informó que hay dos obras en construcción actualmente: la subsección Lamaní-Quebrachal y la subsección San Antonio-Lamaní, en total son 49.9 kilómetros en ejecución actualmente. “Las obras se encuentran en un 50% de avance físico y los trabajos de terracería se encuentran terminados en un 100%. Se trabaja en la remoción de derrumbes en el kilómetro 20 que dejó el paso de Eta y Iota”, informó Invest-H.

    LA PRENSA constató las obras de construcción, ya que desde la aduana de El Amatillo hasta San Antonio del Norte, Honduras tiene una carretera de primer nivel con cuatro carriles, perfectamente señalizada y terminada. Es a partir de ese tramo hacia Lamaní donde la carretera está en construcción.

    A diferencia del último reportaje publicado sobre el Canal Seco, cuando todavía había 30 kilómetros de calle de tierra, los mismos ya están pavimentados, aunque no señalizados, por lo que el tránsito de vehículos es más fácil ahora.

    Invest-H informó que debido a las impactos de la pandemia del covid-19 y el paso de las tormentas Eta y Iota, la fecha de finalización fue ampliada.

    Camiones ya transitan por la vía de primer nivel del Canal Seco. Las obras todavía continúan con la pavimentación de áreas de descanso para los transportistas.

    Recorrido

    El equipo de LA PRENSA recorrió la moderna carretera. Se observa que el tránsito de vehículos todavía es mínimo y la actividad económica a orillas de la carretera es casi nula.

    En los 96.20 kilómetros que duró el viaje se podían observar pequeños camiones llenos de frutas o verduras, propio de la actividad económica de la zona central del país, así como camiones que transportaban algunos derivados del petróleo.

    El paso de vehículos normales es mínimo y se pueden ver algunos comedores o pulperías a orillas de la carretera. La única estación de combustible se encuentra al iniciar el Canal Seco en el municipio de Lamaní.

    El estado de la carretera en las zonas ya finalizadas es impecable y en la que está recién pavimentada solo falta la señalización y varios tramos donde solo está habilitado un carril. Todo el recorrido del Canal Seco se hace en una hora y media, por lo que el ahorro de tiempo para los transportistas que antes tenían que ingresar a Tegucigalpa para llegar al sur del país es muy significativo, recortando su viaje en casi la mitad del tiempo.

    Anteriormente los transportistas de carga pesada tenían que recorrer 228 kilómetros desde el desvío de la Villa de San Antonio hasta El Amatillo entrando por Tegucigalpa.

    El recorrido duraba casi cuatro horas. Ahora con el Canal Seco, el recorrido es de 101 kilómetros, lo que permite evitar manejar 118 kilómetros más, que se convierte en un beneficio económico para el sector transporte. Además con la entrada de Palmerola en funcionamiento que se espera sea en octubre del presente año también se potenciará el sector turismo.

    Aún se está trabajando en las zonas afectadas por Eta y Iota.

    Emblemática

    El Corredor Logístico tiene una longitud de 386 kilómetros, une los puertos de La Unión en El Salvador y Henecán en el pacífico con el de Puerto Cortés en el Atlántico.

    El Canal Seco es una obra emblemática para el país, pues forma parte del Corredor Logístico que impulsa el Poder Ejecutivo con la visión de colocar a Honduras en la vanguardia de los negocios, el comercio y la inversión.

    Actualmente la inversión ronda cerca de los 260 millones de dólares con fondos de financiamiento del Banco Centroamericano de Integración Económica y una contraparte del Gobierno de Honduras.

    En sus diferentes procesos de construcción ha creado unos siete mil empleos directos y unos cinco mil indirectos. Otro beneficio que está dando el Canal Seco es apoyar a los productores de los departamentos donde este corredor se encuentra, ya que facilita la comercialización y transporte de sus productos.

    Datos
    49.9 kilómetros está trabajando Invest-H actualmente para finalizar la construcción de la carretera.
    5,000 empleos directos y siete mil indirectos ha generado la construcción del Canal Seco.

    María Antonia Rivera, designada presidencial y coordinadora del Consejo Nacional de Logística, señaló que la finalización del Canal Seco tiene un beneficio para el país porque incrementa la red vial pavimentada con parámetros de diseño y seguridad de primer mundo en zonas de montaña y acorde con las normas internacionales, cumpliendo con los requisitos del Sistema de Integración Centroamericano (Sieca), además de mejorar la conectividad entre las zonas noroccidental y suroriental del país.

    “Se estima que los beneficiarios directos en la zona de influencia andan en 200,000 habitantes, los usuarios de la vía 1.2 millones y los beneficiarios indirectos por la disminución de los costos de los artículos es de 3.2 millones si se consideran los países vecinos”, comentó a LA PRENSA la designada presidencial.

    Explicó que para el traslado de mercadería de las zonas norte y sur se estima -que por la diferencia de distancia y el menor tiempo de viaje por una carretera con mejor alineamiento y mayor seguridad de ahorro- se pueden ahorrar entre $1.40 y $1.70 por kilómetro.

    La competitividad es incrementada de manera sustancial, pues se produce una conectividad rápida entre la zona industrial del país como es el valle de Sula y una zona con un alto potencial agrícola como es la zona sur, lo que hace que ambas se complementen con sus productos y servicios a menor costo y tiempo, dijo Rivera.