Gobierno no cumplirá meta de reparar 12,000 escuelas
La administración actual proyectó rehabilitar 12 mil centros en estado crítico en cuatro años, pero este año redujo la meta a 6 mil, la mitad de lo propuesto, y asegura haberla cumplido.

- 11 de mayo de 2025 a las 23:25 /
“Las gradas están rajadas desde hace años, no hay barandales y cuando llueve, las aulas —especialmente las de primer grado— se convierten en charcos. Es un desastre”, lamentó Mariel Núñez, una joven madre de dos niños matriculados en la escuela Lisandro Quezada, ubicada en la colonia Hato de Enmedio, en la capital.
Pero esta no es una excepción, sino la regla. LA PRENSA Premium recorrió algunos centros educativos de Tegucigalpa y San Pedro Sula, donde se constató que los problemas de infraestructura escolar son constantes y van más allá, con techos en mal estado, baños deteriorados, falta de energía eléctrica y estructuras que representan un riesgo para los estudiantes.
Algunas instituciones ni siquiera cuentan con acceso a agua potable, y las mejoras que solían depender del apoyo del gobierno de Estados Unidos han quedado en incertidumbre tras la orden del entonces presidente Donald Trump de suspender la ayuda humanitaria por tres meses.
Otras, en cambio, han recibido el apoyo de los propios padres de familia, quienes, con recursos de su bolsillo, contribuyen a mejorar algunas áreas de los centros escolares de sus hijos.
“No queda de otra, así nos manejamos porque no hay respuesta y la escuela se desploma pues. Además de eso los mismos maestros son los que ponen para los recursos también”, contó doña Lourdes Flores, madre de familia que matriculó a su hijo en el Instituto José María Casco, ubicado en la colonia La Sosa de Tegucigalpa.
La crisis de infraestructura viene arrastrando años, por lo que la presidenta Xiomara Castro se fijó la ambiciosa meta de rehabilitar 12 mil centros educativos durante su mandato (unas 3,000 por año). Sin embargo, expertos advierten que esta medida responde a las promesas populistas que han marcado el gobierno de Castro y que, con el tiempo en su contra, es probable que quede incumplida.
Fue en agosto de 2023 que la presidenta Castro aprobó en Consejo de ministros una partida de 2 mil millones de lempiras y firmó un acuerdo con la Asociación de Municipios de Honduras (Amhon) para ejecutar las reparaciones.
Sin embargo, varios alcaldes rechazaron los 6.6 millones de lempiras asignados a sus municipios, una decisión que Daniel Esponda, ministro de Educación calificó de “inmadurez política”.

Cifras
14,188
escuelas dañadas
había previo al inicio del gobierno de Castro
LA PRENSA Premium solicitó en reiteradas ocasiones y por diversos canales de la Secretaría de Educación, el listado de las escuelas que han sido y serán intervenidas (con fondos nacionales e internacionales), durante el gobierno de la presidenta Castro, pero al cierre de esta edición, la información no fue proporcionada.
Los únicos datos que ha dado a conocer Educación es que en 2022 se repararon 1,065 centros escolares y en 2023 la cifra subió a 2,347. En 2024, este rotativo conoció que se tenían priorizadas 2,172 escuelas en los 18 departamentos del país, pero se desconoce si se cumplió la intervención a cabalidad.
A partir de este año, el gobierno modificó el discurso, indicando que la meta de escuelas a reparar asciende a únicamente 6 mil, la mitad del objetivo original. Esta nueva meta ha sido manejada por Castro en diversos eventos y replicada en los medios oficiales de la administración.
En febrero pasado, durante la inauguración del año lectivo escolar 2025, Esponda indicó que el gobierno ha reparado 5 mil centros, una cifra que no se puede utilizar debido a la falta de acceso a los datos.
A inicios de mayo, el ministro de Educación aseguró a medios televisivos, durante un evento por la erradicación del analfabetismo en Cortés, que la meta de reconstrucción escolar se había alcanzado.
“El país tiene 23 mil escuelas, encontramos destruidas más de 12 mil, es decir que más de la mitad de la infraestructura escolar del país estaba destruida y el gobierno, la presidenta Castro se comprometió a reparar al menos la mitad y esa meta casi que ya la cumplimos”, dijeron.

En el informe “Reconstrucción de Centros Educativos” de 2023, publicado por Educación, se revela que en Honduras operan un total de 22,680 centros educativos distribuidos en 17,525 planteles.
De estos, se identificó que 14,188 instalaciones estaban dañadas, pero la brecha se fue reduciendo poco a poco, aunque sin alcanzar la meta establecida de 12 mil reparaciones.
”Para mí, el problema ha estado en la Secretaría de Educación y en las malas decisiones que se tomaron en el poder ejecutivo para la reconstrucción escolar”, opinó Joel Navarrete, presidente del Colegio de Profesores de Educación Media de Honduras (Copemh).
Mencionó que uno de los mayores errores ha sido el conflicto entre la Secretaría de Educación y el Fondo Hondureño de Inversión Social (FIS), el cual ha generado una lucha interna sobre quién debía ser responsable de la reconstrucción de las infraestructuras escolares.
El presidente del Copemh también criticó la decisión de la presidenta Castro de permitir la participación de los alcaldes en el proceso de reconstrucción. Según él, este enfoque fue un error político debido a que los alcaldes, en su mayoría de filiación nacionalista y liberal, no han demostrado interés real en mejorar la educación. “Ellos hacen bien bonita una escuela, con ella se toma la foto y ya estuvo. No les interesa lo demás”, dijo.
Panorama
El informe “Avances insuficientes y exclusión educativa persistente” publicado en 2025, como parte del Estado de país de la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ), muestra que la ejecución en infraestructura educativa reflejó una mejora en 2024, alcanzando un 84%.
El documento muestra que en 2022 los montos vigentes para mejora de infraestructura eran de L710 millones, de los cuales se ejecutaron apenas L240.3 millones. Para 2023, el monto vigente era de L754 millones, mientras que el ejecutado fue de L650 millones.
En 2024, el monto vigente fue de L1,457 millones a L1,221.7 millones ejecutados.
”El presupuesto en Educación de 2024 fue de L4,282 millones, pero en su mayoría fue destinado para sueldos y salarios”, menciona el informe.
Al respecto, el exministro de Educación y director de Educación de la ASJ, Marlon Escoto, explicó que todavía sigue la precariedad en la infraestructura educativa, pues “siempre han existido otro tipo de influencias para reconstruir o reparar centros, no en función de la precariedad sino por otros intereses”.
Mencionó que estos factores impactan en el desempeño de los estudiantes. “En la prioridad deben estar los profesores, los textos, que han desaparecido y no han sido considerados, y la estructura porque existe una relación directa entre la asistencia, la matrícula, la permanencia y el desempeño escolar de acuerdo al entorno en los centros educativos”, agregó Escoto.
”Habría que hacer un estudio más profundo entre edificios nuevos y asistencia, permanencia, desempeño frente a edificios en mal estado o edificios que no existen, por ejemplo, mucha educación prebásica funciona en edificios prestados, en bodegas, en viejas infraestructuras de escuelas. Estas son las líneas más precarias de la infraestructura escolar, la prebásica, la preescolar, suburbana y rural principalmente”, dijo el experto.
Cambios
Por su parte, Johnny Varela, especialista y consultor en temas educativos, consideró que el incumplimiento de esta meta no debe atribuirse únicamente a la magnitud del objetivo, sino a una serie de factores que van más allá de la mera voluntad política.
Uno de los problemas recurrentes, según Varela, es la falta de continuidad en los planes de infraestructura de administraciones anteriores. La visión de largo plazo ha sido una debilidad histórica, ya que los gobiernos suelen desechar o modificar los planes previamente establecidos sin considerar su viabilidad a futuro.
Para Varela, es fundamental que las políticas públicas sean analizadas de manera crítica, sin los intereses partidarios que a menudo limitan una visión de bienestar colectivo, lo cual impacta negativamente en la implementación de soluciones efectivas.
”Históricamente la falta de pensamiento crítico en torno a la gestión de los recursos y la priorización de intereses partidarios sobre el bienestar social, reflejan una visión limitada que no favorece el desarrollo de proyectos duraderos y sustentables”, mencionó
El especialista recalcó que, aunque el gobierno ha destinado una considerable suma de dinero para la rehabilitación de infraestructura escolar, estos esfuerzos aún son insuficientes frente al tamaño del desafío.
LA PRENSA Premium intentó obtener una entrevista con el ministro de Educación, para conocer los planes para su último año de gestión, pero hasta el cierre de este artículo, no hubo respuesta.
En marzo pasado, Honduras firmó un acuerdo de cooperación con China por un total de 6,800 millones de lempiras (275.6 millones de dólares) destinado a la mejora de la infraestructura escolar.
Con estos fondos no reembolsables, se financiará el Proyecto de Intervención Integral de Infraestructura y Equipamiento de centros educativos, según anunciaron las autoridades hondureñas.
Más recientemente, en agosto, ambos países suscribieron un acuerdo para realizar un estudio de factibilidad con el objetivo de construir y equipar 375 centros educativos.
El proyecto tiene como propósito transformar el sistema educativo del país, priorizando la construcción y el equipamiento de centros educativos en sectores clave, como el agrícola, la Red Solidaria, comunidades marginadas, grupos étnicos, así como la creación de escuelas emblemáticas y mega planteles educativos.
Sin embargo, se desconoce su alcance de ejecución. Se espera que, en la recta final del gobierno de Castro, las autoridades presenten un informe oficial que detalle los logros y desafíos de su gestión en la Secretaría de Educación.