Tegucigalpa, Honduras.
El Hospital San Felipe ha sido uno de los primeros centros habilitados para atender la pandemia en el Distrito Central, recibió a la paciente cero y sigue atendiendo pacientes a la fecha con 102 camas habilitadas en cuatro salas.
Una moderna unidad de cuidados intensivos fue inaugurada en las instalaciones físicas del Hospital de Especialidades San Felipe del Distrito Central, que atenderá a pacientes con diagnóstico complicado del COVID-19.
Con esta unidad se busca fortalecer la capacidad instalada de los hospitales en la capital hondureña para atender pacientes referidos por coronavirus. También se reconstruyó y equipó con una inversión de 2 millones de lempiras donados por el Gobierno de Taiwán en obras de infraestructura y 2.5 millones de lempiras como contraparte del presupuesto nacional.
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La unidad de cuidados intensivos llevará el nombre del médico jubilado Rigoberto Edmundo Barahona Cuéllar, quien laboró por más de 30 años en el Hospital San Felipe, como reconocimiento a su experiencia en las ramas de la medicina.
 La placa de la nueva unidad lleva el nombre de recordado médico Rigoberto Barahona Cuéllar.
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Agradecimiento a Taiwán
Las autoridades de Gobierno agradecieron a la embajadora de Taiwán, Ingrid Hsing, por las obras realizadas para el mejoramiento de condiciones de uno de los hospitales más antiguos de Honduras durante su gestión en la representación diplomática.También se conoció que la atención en clínicas y hospitales privados de pacientes diagnosticados con el mortal coronavirus tiene un costo superior a los 100,000 lempiras diarios.
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“Estas camas se van a destinar para atención a pacientes COVID-19, posteriormente serán utilizadas para pacientes oncológicos y otras patologías que vienen de distintas partes del país”, explicó la primera dama Ana García de Hernández durante el evento de inauguración.
A la inauguración también asistieron el director del Hospital San Felipe, Edwin Javier Cruz, el doctor Rigoberto Barahona Cuéllar y la ministra de Salud Alba Consuelo Flores.
