19/07/2025
06:22 AM

Obama, latinos y América Latina

Denver. Barack Obama llegó sin prisa y con la absoluta convicción de que puede convertirse en el primer presidente afroamericano en la historia de Estados Unidos.

    Denver. Barack Obama llegó sin prisa y con la absoluta convicción de que puede convertirse en el primer presidente afroamericano en la historia de Estados Unidos.

    Lo había conocido en dos ocasiones anteriores, durante los debates presidenciales y, por lo tanto, ya no me sorprendió su altura, flacura y lentitud de sus elegantes movimientos. Pero en esta ocasión lo sentí imperturbable, centrado, con un balance interior que sólo se puede describir como espiritual.

    No me lo pude imaginar gritando, ni enojado. Da la impresión que piensa todo -una fracción de segundo más que el resto de los mortales- antes de hablar.

    Hay políticos que esconden sus debilidades y pretenden aparecer más fuertes de lo que son. Obama no. Se acepta vulnerable. Es esa cualidad la que le permite conectar con la gente y con los votantes, sobre todo los más jóvenes.

    El objetivo de esta entrevista de veinte minutos con el candidato era ver qué tanto sabía sobre los hispanos en Estados Unidos y respecto a América Latina. Y sin duda había hecho su tarea.

    La senadora Hillary Clinton obtuvo más votos de latinos que él durante las votaciones primarias en los cincuenta estados y Puerto Rico. Algunos creen que es por la tensión que por décadas ha existido entre afroamericanos y latinos. Pero otros apuntan al poco, ineficiente e improvisado esfuerzo de la campaña de Barack Obama entre los votantes hispanos. 'Creo que sólo tiene que ver con el hecho de que los latinos me conocen menos a mí que a la senadora Clinton', me dijo a manera de explicación. No saben, añadió, que ha trabajado con la comunidad latina de Chicago, que apoyó los esfuerzos de legalizar a los indocumentados y de mejorar los programas educativos. Pero lo que muchos sí saben es que, como senador, votó a favor de construir 700 millas de un muro en la frontera con México.

    -'Si llega a ser Presidente', le pregunté, '¿pararía la construcción del muro?' 'Quiero saber primero qué es lo que funciona…', respondió. '¿Pero un muro funciona?'. 'No lo sé todavía'. 'Pero usted ya votó para construir el muro'. 'Bueno, lo entiendo. Yo voté para iniciar la construcción del muro en ciertas áreas de la frontera. Creo que hay algunas zonas en las que sí tiene sentido y puede salvar vidas.' Alrededor de 400 personas mueren en esa frontera cada año.

    Otro asunto que también revisaría como Presidente sería el de las redadas y deportaciones de indocumentdos. 'No creo que sea la manera norteamericana de hacer las cosas el arrestar a una madre, separarla de su hijo y deportarla, sin medir las consecuencias', me dijo.

    Barack Obama nunca ha viajado a América Latina en sus 46 años de edad. No apoya el Tratado de Libre Comercio que negocian los Gobiernos de Estados Unidos y Colombia. Y quizás suspendería o renegociaría el tratado comercial que existe desde 1994 con México. Pero su política exterior para la región va mucho más allá. 'Hay una conexión natural entre Estados Unidos y América Latina'.

    Esto haría Barack Obama en América Latina: 'Iniciaría pláticas con nuestros enemigos en Cuba y Venezuela… (levantaría) las restricciones de viaje a quienes tienen familiares en Cuba… Quiero unirme a países como Brasil para buscar formas más limpias de energía… Aprobé el Tratado de Libre Comercio con Perú pero me opongo al de Colombia hasta que tenga la confianza que no están matando ahí a líderes sindicales… hay que parar este tipo de actividades paramilitares'.

    ¿Y Hugo Chávez? ¿Es una amenaza para la seguridad nacional de Estados Unidos y del resto del continente? 'Sí creo que sea una amenaza, pero es una amenaza manejable', me contestó. 'Sabemos, por ejemplo, que pudo haber estado involucrado con el apoyo a las Farc (Fuerza Armadas Revolucionarias de Colombia) y perjudicando a un vecino. Ése no es el tipo de vecino que queremos…'.

    A pesar de que sus declaraciones sobre Venezuela y Cuba –'dudo que Fidel haya escrito (su último editorial)…Creo que está muy enfermo para hacerlo'- son las que han generado más noticias, es la relación con México la primera que quiere reparar.

    Durante un reciente discurso sobre Cuba, sólo pronunció en español la palabra 'libertad'. Y, con la ayuda de un teleprompter, acaba de grabar un comercial en español para Puerto Rico. Él está consciente que champurrear unas palabritas en español no es suficiente para ganar los diez millones de votantes latinos en las elecciones presidenciales de noviembre y la buena voluntad de 550 millones de latinoamericanos.