06/12/2023
04:03 PM

¿Enfocados al pasado o al futuro?

No pretendo que la historia sea cierta. Pero tiene una buena lección. Es sobre un hombre al que su médico le detectó un raro mal. Estaba perdiendo la memoria.

    No pretendo que la historia sea cierta. Pero tiene una buena lección. Es sobre un hombre al que su médico le detectó un raro mal. Estaba perdiendo la memoria. Para conservarla, tenía que tomar una medicina que lo dejaría ciego. Ante la difícil decisión, pidió al doctor una semana para pensarlo. Sin embargo, no regresó jamás. Al tiempo, el doctor lo encontró en una reunión y le preguntó sobre la decisión pendiente. El paciente sacó una libreta, buscó entre sus páginas el caso del que le hablaba. Le dijo entonces que había decidido escribir todo lo que recordaba y conservar la vista. Juzgaba, muy acertadamente, que para el ser humano era mejor ver el futuro que recordar el pasado.

    Siempre me llamó la atención que en las escuelas y colegios no se hagan ejercicios imaginativos sobre lo que debería hacerse en el futuro. ¿Cómo visualizamos Honduras en el 2020? ¿Y en el 2050? ¿Y en el 2100? ¿Qué necesitamos hacer para que 'eso' se convierta en realidad? Por supuesto reconozco el valor formidable de la historia, sobre todo como fuente de enseñanza para apoyarnos en los valores positivos y aprender de los errores para no tener que repetirla. Porque Dios, en su sabiduría, no nos permite volver al pasado y mucho menos modificarlo. Y sin embargo hay mucha gente lo intenta. De ahí los 'si tan sólo hubiera hecho tal o cual cosa' o 'si no hubiera hecho aquello...'

    ¿Recuerda usted la simpática película 'Volver al futuro'? El argumento no puede ser más fascinante. Un joven viaja al pasado y logra que su padre adquiera más confianza y seguridad en sí mismo, y en esta forma enamore a su madre, con lo cual él se garantiza su existencia. La película es divertida, pero usted sabe que en la vida real estas cosas no existen.

    Lo que sí existe es nuestro futuro. Por ello adquieren tanto valor las palabras de Samuel Weiss: 'Dios nos concedió algo de su poder creador al darnos primero la capacidad de imaginar cómo serían las cosas y, después, la capacidad de trabajo para convertir en realidad lo que somos capaces de imaginar'. ¿No es esto maravilloso?

    LO NEGATIVO: Estar tan enfocados en el pasado que dejemos de percibir el futuro.

    LO POSITIVO: Ver el pasado como fuente de enseñanza, pero enfocar nuestra mirada al futuro y trabajar para convertirlo en realidad.