25/04/2024
02:29 AM

De nuevo, prudencia

    Tanto durante la temporada de Navidad como en los días previos a la Semana Santa, en los que miles de hondureños se desplazan hacia los sitios de recreo y descanso o para visitar a la familia, y ahora en esta Semana Morazánica es necesario, hoy más que nunca, recordar la importancia de ser prudentes, tanto mientras se viaja de un lugar a otro, como durante la estadía en los lugares de destino.

    No está de más recordar que los accidentes de tránsito son una de las principales causas de mortalidad en nuestro país, y que es muy importante conducir con precaución, respetar las señales de tránsito y las indicaciones que la autoridad nos haga, así como contar con un conductor designado o no manejar si se ha ingerido alcohol y no se está en condiciones para ponerse al volante de un automóvil.

    Los que van a viajar en motocicleta; cada vez hay más hondureños que optan por este medio por su fácil movilización y su economía, deben tener presente que su cuerpo está expuesto y que, aunque lleven un casco puesto en la cabeza, no son invulnerables.

    Todos queremos llegar rápido a la playa, a la montaña, a la casa de amigos o parientes, pero, como reza el tan sabio y antiguo refrán: es mejor llegar tarde, que nunca.

    Por otro lado, debemos evitar los excesos en bebidas o comidas. No está bien que, luego de unos días de supuesto descanso, regresemos en un estado físico peor al que teníamos antes de esta semana o que retornemos enfermos a la ordinaria actividad laboral.

    Y, además, aunque se habla ya de que estamos en etapa de pospandemia, no es cierto que el covid-19 haya desparecido del todo del panorama; hay nuevos contagios, personas que terminan en el hospital, y, aunque la positividad a la hora de realizar una prueba sigue yendo a la baja, no podemos actuar irresponsablemente, sobre todo porque todavía hay personas que, ya sea por inconsciencia o por otros motivos, todavía no tienen ni una dosis de vacuna o apenas recibieron la primera o la segunda.

    En esos casos es necesario la “psicología del anuncio”, como se suele decir: advertir, insistir, repetir, para intentar calar en la conducta de la gente y convencerla de que lo que se les propone es por su propio bien y no es invento ni capricho de nadie.

    De nuevo, pues, prudencia. El descanso no solo es necesario, es indispensable, pero hay que tomarlo con sentido común, con sensatez, sin ponernos en riesgo, ni poner en riesgo a los que nos rodean.