20/12/2025
11:46 AM

Burbujas y espejismos

    El debate en torno a la crítica, por no usar el adjetivo caótica, situación de San Pedro Sula, sostenido por LA PRENSA, está abriendo camino, pero trata de eliminar los espejismos como si de la noche a la mañana se eliminase el lastre acumulado durante décadas. Aludir a enero y al inicio de la próxima administración local ya no produce ni brisa para refrescar, pues es tal la carga que exige una ilimitada actitud positiva y perseverancia, por lo menos, a mediano plazo.

    Más que en los baches, buen reflejo de la crisis, en la recolección de desechos, en la contaminación de los ríos por carencia de plantas de tratamiento, etc. etc. la mirada debiera estar puesta en un plan, ayer, hoy y mañana, pero también al gobierno local llegan mesías, con fórmulas mágicas de triunfo, burbujas que terminan por explosionar en sus rostros.

    La historia es tan reciente que la dejaremos a un lado para no servir de instrumento a lo mismo o similar que ya se otea en el horizonte. Con nuevo gobierno o no “el próximo año será muy difícil”, pues ni las doce campanadas, ni la colocación de la banda y la entrega del bastón cambian las situaciones. Solo contribuyen a la desaparición de los espejismos con los primeros lamentos que abundarán en la próxima administración.

    Tres opiniones presentaba LA PRENSA en su edición de ayer en las que con nitidez se reflejan las crisis y las oportunidades no solo de crecimiento, sino de desarrollo. El desafío renueva el reto para los sampedranos que habrán de comenzar a sobreponerse a un ciclo fatal y un período electoral, cuyo desenlace marcará el destino inmediato de los próximos cuatro años, pero también el de las próximas décadas.

    “Somos como un barco a la deriva. La política ha afectado el desarrollo. En los últimos 10 años no se han ejecutado obras de infraestructura... Creo que nos hemos quedado sin norte”, advierte Guillermo Altamirano, economista. “Quien gane tendrá que resolver los problemas de inseguridad y falta de inversión para ver crecimiento”, señala Fernando Jaar, presidente de los empresarios.

    “El próximo año será muy difícil, ya que ha sido un reto sostenerse y mucho más crecer. La situación económica de San Pedro Sula es crítica. Ha existido gran incertidumbre, en parte por las elecciones y porque hemos tenido gobiernos centrales muy activistas, reconoce Carlos Urbizo, cuyo voluntariado en las finanzas municipales fue rechazado.

    “Buscar oportunidades de negocio y ser optimista”; “hay muchas empresas interesadas en invertir”, con el resultado de las elecciones “puede que haya un alza”. Tres criterios que a poco más de tres meses de terminar esta administración nos acercan más a la realidad, a la que habrá que hacer frente en un ambiente de supervivencia y con escasos éxitos en el corto plazo.