29/04/2024
12:34 AM

La música y el silbido

Alfredo Haces

La música comenzó con un silbido bien afinado y agradable al oído en esa época primitiva de la Edad de Piedra. La historia narra que el primer medio musical fue la voz humana, y la técnica, el silbido.

Pues pertenece a los instrumentos de viento y el músico primitivo lo dominaba a la perfección debido a su fortaleza física, con su gran caja torácica y potentes pulmones que hacían competencias con las grandes aves prehistóricas de esos albores de la vida y la música.

La música de viento se acompaña con la técnica de la percusión, donde las piedras y los huesos empezaron a ser utilizados por cantantes primitivos que balbuceaban, gruñían, aullaban y gritaban en todas las tonalidades musicales.

Saltando hasta la etapa de la historia con las nuevas civilizaciones, la música toma una diversidad y modernidad de instrumentos musicales de viento, percusión y aparecen las cuerdas y de voces privilegiadas. Para muestra la lira y la cítara.

Los clásicos del período Posbarroco, como el piano de cola de Ludwig Van Beethoven y su genial obra “La novena sinfonía” -después conocida como “El himno a la alegría”- , y el violín de Nicolo Paganini, entre sus principales partituras musicales, el “Capricho No 24”.

Y así la música llega al siglo XX, con una variedad de instrumentos, armonías, melodías, ritmos y voces privilegiadas de hombres y mujeres que deleitaron a esas privilegiadas generaciones con poemas-canciones románticas o rítmicas inspirados en el amor, especialmente.

Pero al llegar el siglo XXI surgen una serie de ritmos de mala calidad, monótonos, acompañados de voces desafinadas, toscas y ofensivas al oído, como el reguetón, que en el Día Mundial de la Música este 22 de noviembre pasado es un gran “éxito” en un país llamado Honduras.