25/07/2024
01:01 AM

Deberes del presidente

América Murillo

Estos son algunos de los deberes que debe ejecutar la presidenta en funciones de acuerdo con el artículo 245 de la Constitución de la República.

1. Dirigir la política general del Estado y representarlo; 2. Mantener la paz y seguridad interior de la República y repeler todo ataque o agresión exterior; 3. Mantener incólume la independencia y el honor de la República, la integridad e inviolabilidad del territorio nacional; 4. Nombrar y separar libremente a los secretarios y subsecretarios de Estado, y a los demás funcionarios y empleados cuyo nombramiento no esté atribuido a otras autoridades; 5. Dirigir la política y las relaciones internacionales; 6. Velar en general, por la conducta oficial de los funcionarios y empleados públicos para la seguridad y prestigio del gobierno y del Estado; 7. Formular el Plan Nacional de Desarrollo, discutirlo en Consejo de Ministros, someterlo a la aprobación del Congreso Nacional, dirigirlo y ejecutarlo; 8. Hacer que se recauden las rentas del Estado y reglamentar su inversión con arreglo a la ley;9. Publicar trimestralmente el estado de ingresos y egresos de la renta pública; 10. Organizar, dirigir, orientar y fomentar la educación pública, erradicar el analfabetismo, difundir y perfeccionar la educación técnica; 11. Adoptar las medidas de promoción, prevención, recuperación y rehabilitación de la salud de los habitantes; 12. Dirigir y apoyar la política de Integración Económica y Social, tanto nacional como internacional, tendiente al mejoramiento de las condiciones de vida del pueblo hondureño; 13. Velar por la armonía entre el capital y el trabajo; 14. Dirigir la política económica y financiera del Estado. Este artículo le impone 45 deberes al mandatario en funciones.

Si analizamos la gestión personal de nuestra presidenta observamos que no ha cumplido con muchísimos deberes de esta lista, pues con sus discursos no intenta implementar la paz en el país.

Con la tragedia de la matanza en Texas de cinco compatriotas y la manera displicente en que actuaron nuestras autoridades diplomáticas, no contribuyeron al buen prestigio de su gobierno.

En los renglones de educación y salud, su gestión no ha sido de acuerdo a las necesidades de nuestro pueblo.

No se están haciendo esfuerzos para mejorar las condiciones de vida del pueblo y tampoco se está trabajando para fomentar la armonía entre el capital y el trabajo.

Estamos terminando los primeros dos años de su gobierno, aún se le tiene confianza, señora presidenta, y esperamos que rectifique los errores cometidos, que continúen los aciertos que ha tenido y recuerde que Honduras no es una isla y que pertenece a América Central, no a América del Sur.