12/09/2024
09:39 AM

Rusia y EUA ratifican el tratado nuclear Start III

La secretaria de Estado de EUA, Hillary Clinton, y el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, ratificaron ayer formalmente el tratado de reducción nuclear Start III en el hotel Bayerischer Hof de Múnich, adonde se celebra la 47 Conferencia de Seguridad.

    La secretaria de Estado de EUA, Hillary Clinton, y el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, ratificaron ayer formalmente el tratado de reducción nuclear Start III en el hotel Bayerischer Hof de Múnich, adonde se celebra la 47 Conferencia de Seguridad.

    El tratado ya fue firmado el 8 de abril de 2010 en Praga por los presidentes de Rusia y Estados Unidos, Dimitri Medvedev y Barack Obama, respectivamente.

    El Tratado de Reducción y Limitación de Armas Estratégicas entrará en vigor automáticamente después de la firma en la ciudad al sur de Alemania y establece que ambos países, que poseen el 90% de las armas nucleares existentes en el mundo, se comprometen a reducir el número de ojivas nucleares estratégicas desplegadas en un 30%.

    Así, el Start III impone que ambas naciones reduzcan sus ojivas atómicas desplegadas en un plazo de 7 años hasta un máximo de 1,550, sin que afecte a las cabezas almacenadas, y sus portadores o misiles balísticos deberán recortarse hasta un máximo de 800. Según expertos nucleares, el acuerdo de reducción nuclear dejará a EUA con un total de 5,200 cabezas nucleares, frente a las 4,850 de Rusia.

    El acuerdo supone un recorte de un tercio menos de ojivas nucleares en comparación con lo pactado por ambos países en el acuerdo de Moscú de 2002, anulado por las dos partes, y sustituye al convenio firmado en 1991 y que caducaba el pasado 5 de diciembre de 2009.

    Tanto Lavrov como Clinton destacaron hoy en Múnich el buen momento de “colaboración” entre ambos países, grandes enemigos durante la Guerra Fría del siglo XX.

    En su alocución ante los 350 invitados a la Conferencia de Seguridad de Múnich, Clinton mostró la disposición de Estados Unidos a “seguir trabajando con Rusia, ya que significará reforzar nuestra seguridad común”.