Dos atacantes suicidas que tenían como objetivo atacar vehículos militares detonaron sus explosivos con segundos de diferencia; mataron al menos a 45 personas en Lahore e hirieron a unas 130, anunció la Policía.
Horas después otra explosión estremeció Lahore, pero no hubo informes inmediatos de heridos graves. La Policía dijo que aparentemente se trató de explosivos sueltos, no una bomba armada, abandonados junto a una casa. No se suministraron otros detalles.
En los ataques suicidas, los kamikazes se acercaron caminando a los vehículos del Ejército en un barrio militar y detonaron sus explosivos cerca de un mercado abarrotado, en momentos en que los transeúntes acudían a la gran plegaria musulmana de los viernes.
“Hemos recuperado las cabezas de los dos kamikazes. Hubo un intervalo de 15 segundos entre las dos explosiones, su objetivo era un convoy de vehículos militares”, declaró el oficial de policía Chaudhry Mohamad Shafiq en declaraciones transmitidas en directo por las televisiones paquistaníes.
“Hubo 45 muertos y 134 heridos”, informó el jefe de la Policía de la provincia de Punyab, Tariq Saleem Dogar.
Un oficial de elevado rango, que pidió el anonimato, dijo a la AFP que entre los muertos había por lo menos ocho militares.“La primera explosión fue débil, se oyeron luego disparos de armas automáticas, e inmediatamente después otra explosión, potente”, refirió a la AFP Mohamad Bilal, un hombre que acababa de sentarse a la mesa de un restaurante del mercado.
Dolor
Una decena de los muertos eran soldados, dijo el comisario de policía de Lahore Parvaiz Rathore.
Los atacantes, los que iban a pie, atacaron en RA Bazaar, un barrio residencial y comercial donde tienen instalaciones varias agencias del Ejército y de seguridad.
Un video tomado con un celular justo después de la primera explosión, muestra a una llamarada anaranjada estallando en el medio de la calle, de acuerdo con lo transmitido por GEO TV, que enseñó una parte del grabación tomada por Tabraiz Bukhari.
“¡Díos mío! ¡Dios mío! ¿Quiénes son estas bestias? ¡Dios mío!”, se escucha en el video en una mezcla de inglés y urdu luego de la explosión.
Unas horas después, cinco bombas de fabricación casera y poca potencia estallaron en el sector de Allamma Iqbal de Lahore, lo que causó daños menores y un movimiento de pánico, pero sin dejar víctimas.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, condenó los atentados, y reafirmó que ninguna causa puede justificar la violencia “inhumana y ciega”.
El lunes pasado, un kamikaze al volante de un coche bomba había pulverizado un edificio de la Policía de Lahore; mató a quince personas.
