Las relaciones diplomáticas de Venezuela se han deteriorado en los últimos meses, con un notable recrudecimiento tras las presidenciales del 28 de julio, cuyo resultado oficial dio la victoria a Nicolás Maduro, que el próximo día 10 espera asumir de nuevo la Presidencia, a pesar de las denuncias de fraude electoral vertidas por la oposición.
Varios de los presidentes de los países cercanos al Gobierno chavista han declinado asistir a la toma de posesión de Maduro ante la crisis política en el país sudamericano.
El último en confirmar que no asistirá a la investidura fue el mandatario colombiano Gustavo Petro, quien aseveró que las elecciones en Venezuela “no fueron libres” por diversas razones, por lo que Colombia no las puede reconocer.
Colombia estará representada en la ceremonia por el embajador colombiano en Caracas, Milton Rengifo.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, tampoco viajará a Venezuela pero enviará un representante de su Gobierno.
Los presidentes de Honduras y Bolivia, Xiomara Castro y Luis Arce, tampoco asistirán a la toma de posesión.
El Gobierno español tampoco enviará a ningún representante a la investidura en Venezuela, confirmaron fuentes del Ministerio de Asuntos Exteriores.
Aliados incondicionales
Entre las críticas de la gran mayoría de los países del continente, Maduro mantiene a sus aliados incondicionales, fieles al chavismo contra viento y marea.
La Cuba de Miguel Díaz-Canel y la Nicaragua de Daniel Ortega lo tienen claro, sin necesidad de prueba alguna. Si el CNE, liderado por magistrados chavistas, dice que ganó Maduro, no hay nada que debatir.
Se espera que Díaz-Canel y Ortega sean los únicos mandatarios de la región que acompañen a Maduro en la toma de posesión, según medios locales.
Aparte de los aliados de la región latinoamericana, la Venezuela de Maduro cuenta con el apoyo de China, Rusia, Irán o Turquía, entre otros, aunque sus relaciones están más centradas en el ámbito económico y comercial que en coincidencias políticas, con menor protagonismo en el tablero internacional.
Se prevé la presencia de delegaciones de estos países en la investidura de Maduro.