Un devastador incendio acabó el pasado martes con la vida del joven Eddy Herrera, de 27 años en Mattituck, Nueva York.
El incendio ocurrió en la vivienda de la familia Peralta Ramírez, quienes perdieron su hogar.
Eddy era originario de Quezaltepeque, Guatemala, había migrado a Nueva York en busca de mejores oportunidades para su familia guatemalteca.
Las autoridades confirmaron que el cuerpo hallado entre los escombros era de Herrera, quien residía en el ático de la vivienda afectada y trabajaba en horario de noche como lavaplatos en CJ’s American Grill.
Eddy, cumplía 27 años el día del incendio, él era el único sustento de su madre en Guatemala.
Amigos, familiares y miembros de la comunidad están recolectando fondos para repatriar el cuerpo de Herrera a su pueblo natal y brindar apoyo económico a su madre.
“Les pido de corazón que nos acompañen y nos aporten su granito de arena para mandarlo a su país. Sé que estos no eran los planes de su mamá, pero necesitamos ahora más que nunca el apoyo para que él regrese a su pueblo”, expresó María Ramírez, residente de la casa, quien consideraba a Eddy como un hijo.
Por otro lado, por su parte, la familia Peralta Ramírez, que perdió todo en el incendio, ha recibido una abrumadora respuesta de la comunidad y organizaciones locales. Han encontrado una vivienda temporal en Riverhead y han recibido donaciones de ropa, comida y dinero.
