James Murdoch, de 38 años, designado por su padre, el magnate de la prensa australiano-americano Rupert Murdoch, como número tres del grupo News Corp, se encuentra en la primera línea del escándalo generado por las escuchas ilegales, que alcanza al conjunto de ese imperio.
Nacido el 13 de diciembre de 1972, de nacionalidad británica, James fue nombrado en marzo como director adjunto de explotación y director general de las actividades internacionales de News Corp., con responsabilidad directa en las operaciones del grupo en Asia y en Europa.
Esas operaciones incluyen a la división News International que reúne a los periódicos británicos del grupo, especialmente News of the World, cuyo cierre fue decidido por James Murdoch ante el escándalo de las escuchas telefónicas ilegales.
Tras su designación, James Murdoch se trasladó desde Londres a Nueva York. Esta promoción fue percibida como una nueva señal de que su padre, de 80 años de edad, lo había escogido para sucederlo.
Lachlan, el hermano mayor de James, fue considerado durante mucho tiempo como el heredero de una dinastía en los medios de comunicación que comenzó con su abuelo Keith, pero renunció súbitamente a sus funciones ejecutivas en 2005 para regresar a Australia, cuna de su familia, sin dar mayores explicaciones.
Cuarto de los seis hijos de Rupert Murcoch, James es el tercero y último de los que su padre tuvo con su segunda esposa Anna. En su juventud tuvo una imagen de rebelde, usando pendientes y luciendo cabello rubio platinado. Pero actualmente presenta un aspecto más formal, con anteojos de metal y pelo corto.
James está casado con una estadounidense y tiene dos hijos.
Luego de haber abandonado sus estudios de historia y de cine en Harvard en 1995, creó su firma de hip hop ('Rawkus'), finalmente adquirida por News Corp. en 1998. De retorno al regazo familiar, dirigió la división musical de News Corp. antes de ingresar al operador australiano de telecomunicación One-Tel, junto a su hermano Lachlan y James Parker, hijo del magnate australiano Kerry Parker.
One-Tel fue puesta en liquidación en 2001 debido a sus grandes pérdidas. Pero James ya se había trasladado a Hong Kong, donde fue enviado en 2000 para dirigir Star TV, empresa en la que había trabajado la nueva esposa de su padre, Wendy Deng, y a la que arribó para corregir el rumbo de esa empresa.
Tres años más tarde, en 2003, su padre lo recompensó al designarlo a los 30 años de edad como director general de BSkyB (British Sky Broadcasting), una de las más importantes empresas británicas que cotizan en bolsa y de la cual News Corp. pretendía tomar el control total, a lo cual tuvo que renunciar el miércoles pasado debido al escándalo de las escuchas telefónicas ilegales.
Su llegada al frente de una empresa presidida por su padre desencadenó acusaciones de nepotismo, pero James no las tuvo en cuenta y logró imponerse.
En 2007 fue designado presidente director general de News Corp. en Europa y Asia, manteniendo el poder en BSkyb. Ingresó al Consejo de Administración de News Corp., del cual ya había sido miembro de 2000 a 2003.
Su padre lo calificó en esa ocasión como 'dirigente talentoso, de lo cual ha dado pruebas, dotado de una rara mezcla de visión internacional y de profunda experiencia en el terreno'. También felicitó a su hijo por haber hecho de Sky 'el grupo más bello de televisión en Europa'.
Tras su nombramiento en marzo como número tres de News Corp., el director de explotación y presidente adjunto del consejo de administración, Chase Carey, elogió a James por haber 'probado en todo un abanico de funciones que es un dirigente con sentido de decisión y profundidad de juicio, y que puede administrar con habilidad los complejos problemas para transformar las actividades' del grupo.
