Un enfrentamiento ayer en una zona rural del norteño estado mexicano de Sonora entre presuntos traficantes de drogas y de indocumentados dejó 21 muertos y nueve detenidos, seis de ellos heridos, informó a Efe una fuente oficial.
El enfrentamiento ocurrió en un camino vecinal, a unos 20 kilómetros de la frontera con Estados Unidos, dijo José Larrinaga, portavoz de la Fiscalía de Sonora.
Horas antes, la Policía Estatal Investigadora, PEI, de Sonora, había reportado el enfrentamiento; pero sólo mencionaba “varios muertos”, sin precisar la cifra.
El enfrentamiento se dio en la madrugada de este jueves entre grupos de presuntos traficantes de indocumentados y de drogas, en un camino vecinal de la zona rural, entre Tubutama y Saric, Sonora, estado fronterizo con EUA.
“Agentes estatales y federales, así como soldados, realizan un operativo en la zona, debido a que se presume que los participantes en los hechos huyeron en diferentes direcciones”, dijo la PEI.
Disputa
Según la prensa local, el control de la zona es disputado por sicarios de los carteles de las drogas de Sinaloa y de los Beltrán Leyva, dos de los más violentos de México. La ola de violencia en México ha dejado en los últimos cuatro años más de 25,000 muertos. Oficialmente se reconoció a principios de abril que la cifra era de 22,743 desde diciembre de 2006 a marzo de este año.
La prensa local, que lleva un recuento extraoficial de los crímenes atribuidos a la delincuencia organizada, señala que en los últimos tres meses se han reportados más de 3,000 muertes, sólo en junio la cifra llegó a 1,200, convirtiéndose en el mes con más muertes atribuidas al crimen organizado en los últimos cuatro años.
Gobierno
El presidente de México, Felipe Calderón, convocó ayer a la región latinoamericana y del Caribe a sumar esfuerzos que permitan ponerle un alto al crimen organizado trasnacional, un “enemigo común” que se nutre de la división y pone en peligro la vida y patrimonio de la gente y los pueblos.
“El crimen organizado se nutre de la división. El enemigo avanza cuando hay desavenencias entre quienes tenemos el deber de enfrentarlo. Mientras un país y una sociedad se mantengan unidos y mientras las naciones de América Latina y el Caribe nos mantengamos unidas, seremos capaces de cerrar el paso a una criminalidad que nos afecta a todos sin distingos”, argumentó.
Durante la clausura de la V reunión de la Comunidad Latinoamericana y del Caribe de Inteligencia Policial, Clacip, celebrada esta semana en Ciudad de México, el mandatario azteca pidió fortalecer la cooperación e intercambio de información entre todos los países de la región.
Esto permitiría, a su juicio, “enfrentar con mayor eficacia a las estructuras delictivas, entre ellos el tráfico de drogas, armas y personas, así como las del secuestro y, sobre todo, la violencia inusitada que genera intranquilidad en las familias”. “El crimen no conoce fronteras y su capacidad va más allá del tráfico de drogas o armas, pues ahora se extiende a la extorsión, secuestro, y todo ello amenaza a la población”, añadió.
El mandatario reconoció que otro de los retos a enfrentar es el de combatir la extorsión y la impunidad.