California, Estados Unidos.
La marina estadounidense causó alarma entre los habitantes del sur de California tras lanzar un misil el pasado sábado por la noche como parte de una prueba de rutina.
Los residentes de San Diego colmaron de llamadas al 911, alertando con diversas teorias sobre la luz brillante que surcó los cielos tras el lanzamiento del misil. Unos aseguraban que se trataba de un objeto volador no identificado, mientras que otros denunciaban que se trataba de una bomba nuclear o un cometa.
El proyectil Trident II (D5), que también fue avistado en Nevada y Arizona y en el estado mexicano de Baja California, no estaba armado, y fue disparado por el submarino balístico Kentucky desde una posición próxima a la costa del sur de California, según confirmaron fuentes militares al diario San Diego Union-Tribune.
Las autoridades del Aeropuerto Internacional de Los Ángeles (LAX) anunciaron el viernes que el espacio aéreo al oeste de sus instalaciones iba a ser utilizado para operaciones militares durante una semana (entre el 6 y el 12 de noviembre), lo que iba a modificar temporalmente las rutas de los vuelos que pasan por LAX. Se adelantó que esa circunstancia generaría un cambio en la actividad aérea en la zona con el consiguiente ruido asociado.
