17/12/2025
11:14 AM

Ya no quieren al avión de vecino

Los instantes de pánico y terror que se vivieron la mañana del viernes en la zona donde cayó el avión Airbus-320 de Taca siguen presentes.

    Los instantes de pánico y terror que se vivieron la mañana del viernes en la zona donde cayó el avión Airbus-320 de Taca siguen presentes.

    Jennifer López (13) no logra olvidar el fuerte estruendo que se escuchó el viernes a eso de las 9.40 de la mañana y el ruido que hicieron las láminas de la humilde cuartería adonde habita con su familia desde hace varios meses. Ese día se encontraba con sus dos hermanas haciendo las tareas de la casa. De repente, dijo, vino el estruendo y todos comenzaron a correr. 'Nosotros nos pusimos muy asustados y entonces vinieron las otras personas que viven aquí y nos dijeron que nos saliéramos y nos fuimos corriendo porque podía haber una explosión', cuenta con cierto temor la pequeña que dice estar aburrida de ver el avión destruido casi enfrente de su casa. Jennifer cuenta que vio el avión cuando empezaba a incendiarse y también a varios vehículos que estuvieron a punto de ser aplastados. 'Yo vi cuando la gente empezaba a salirse del avión, pero nos dijeron que nos fuéramos porque era peligroso'.

    En la misma cuartería también habita Sandra Hernández, madre del pequeño Elías Gómez (6), que recuerda haberse asustado cuando vio el avión. 'Yo estaba viendo ‘tele’ y salí y vi que estaba echando fuego', relató el menor. Según Karla Hernández, tía de Elías, el día del accidente el pequeño se encontraba solo en la vivienda. 'Mi hermana (la mamá de Elías) estaba trabajando y cuando se dio cuenta del accidente se vino muy asustada pensado que le había pasado algo', sostiene.

    Se mudan

    Desde entonces la intranquilidad por el accidente del vuelo 390 de Taca se ha apoderado de niños y adultos. 'Aquí todo mundo ya está pensando en irse porque es bastante peligroso, estamos en la ruta donde salen los aviones', expresó Karla. En la humilde vivienda habitan al menos cinco familias. Unos metros más adelante está la casa de don Luis Borjas, el anciano de 75 años de edad que se encontraba sentado frente a su casa cuando el avión cayó a escasos metros de su hogar. 'A mi siempre me gustó este sillón porque aquí paso sentado; pero ya después de esto hay que ir buscando otro lugar para vivir', dice el abuelo. Otros vecinos también comentaron que se estarían mudando del lugar. Hasta ayer las familias que habitan en el sector conocido como Jardines de Toncontín se quejaban por la falta del suministro eléctrico que desde el pasado 30 de mayo permanece interrumpido.

    Sobre el tema

    Recordando

    El viernes un avión de Taca se salió de la pista del aeropuerto Toncontín cuando aterrizaba en medio del mal clima generado por un fenómeno tropical.

    Saldo de la tragedia

    La aeronave venía de El Salvador con 124 pasajeros, más la tripulación. En el accidente cinco personas perdieron la vida y decenas resultaron heridas.