Una caravana de vehículos recorrió ayer el centro de la apacible ciudad de Tarija, en el sur de Bolivia, haciendo campaña por el Sí al referendo por los estatutos autonómicos que esta región votará el domingo, en medio de sectores de la población que tienen todavía dudas sobre el tema.
Sólo en la plaza de armas, donde está la sede de la Prefectura que tras la previsible aprobación de los estatutos pasará a llamarse Gobernación, hierve el impulso autonomista, mientras en las afueras la gente continúa en la rutina.
Las autoridades de Tarija concentran el 85% de los reservorios probados y probables de gas natural de Bolivia, impulsan el referendo con el argumento de que la región debe administrar su riqueza lejos del poder central de La Paz.
Política
En general, la gente desconoce los detalles de los estatutos autonómicos, aunque algunos intuyen que al votar por el Sí fortalecerán políticamente a su región frente al secante centralismo que ejerce La Paz, sede de los poderes Ejecutivo y Legislativo, hace más de un siglo. Tarija sería el cuarto departamento de Bolivia que realiza un referendo autonómico en contra del Gobierno boliviano.
Dato
La consulta organizada por la prefectura de Tarija y las instituciones civiles de Tarija que tienen como común denominador su oposición al presidente izquierdista Evo Morales.