Pese a que fueron pocos los vendedores ambulantes desalojados, las autoridades municipales y los dirigentes de los achineros consideraron como exitoso el operativo para retirar de las calles del centro de la ciudad a los vendedores que no tienen permiso.
La medida arrancó ayer por la mañana sobre la tercera avenida o calle del comercio, iniciando frente a la catedral, continuó hasta la siete calle sur y culminó en la cuarta avenida.
El operativo se efectuó de manera conjunta entre el departamento de justicia municipal, abastos y mercados, superintendencia, Policía Municipal y agentes de la Policía Nacional.
También participaron en el dispositivo los dirigentes de las organizaciones de vendedores ambulantes para buscar el diálogo y armonía entre los desalojados, porque entre ellos existe un acuerdo de no permitir la instalación de más buhoneros en las calles y avenidas comerciales de esta localidad.
Positivo
“Creo que la medida fue positiva porque casi 40 mesones y pequeñas casetas sin permisos para vender fueron desmanteladas, además, porque sus propietarios no permanecían en el espacio asignado”, indicó el gerente de abastos y mercados, Miguel Rivera.
El funcionario dijo que la acción también fue positiva porque los dueños de los negocios que sacan sus productos hacia las aceras de sus instalaciones comprendieron que los debían vender dentro de sus locales.
Desmantelamiento
Fueron pocos los estantes desmantelados ayer.
Las autoridades contabilizaron entre 40 y 45 los puestos que fueron retirados de las calles.
“Nosotros actuamos en base a las denuncias de los mismos vendedores ambulantes, quienes nos informaron sobre la presencia de 200 nuevos buhoneros”, señaló el superintendente municipal, José Antonio Rivera.
Agregó que la acción se ejecutó porque los buhoneros acusaban a la alcaldía de autorizar la permanencia de los nuevos achineros.
Según el funcionario, la divulgación de la noticia en los medios de comunicación sobre el desalojo “alejó a los vendedores ilegales, a quienes les íbamos a decomisar sus productos”.
Los municipales quitaron los puestos no autorizados. Fotos Josué Banegas y Max Lémus
La presidenta de la Asociación Sampedrana de Mercaderías y Alimentos, Asavemali, Yolanda Pérez, indicó que el operativo también sirvió para que sus afiliados respetaran el espacio que originalmente se les había asignado, porque muchos se extienden sobre el centro de las calles.
Show
Varios sampedranos y buhoneros consideraron que el desalojo fue un espectáculo más por parte de las autoridades edilicias.
“Esa acción es sólo una escaramuza para aparentar que ellos trabajan por el reordenamiento de la ciudad”, manifestó el sampedrano Amilcar Ramos.
“Que mejor nos ofrezcan soluciones definitivas porque con las lluvias se nos arruinan las mercaderías”, apuntó Joel Mencía, uno de los casi cuatro mil vendedores censados por la municipalidad.
En voz propia
“Queremos que se respete el acuerdo de no permitir más vendedores nacionales y extranjeros en esta ciudad”.
Damián Peña
Presidente Suvanh
“La medida fue justa porque también muchos de mis afiliados abusan al tomar espacio de la línea central de las calles”.
Yolanda Pérez
Presidenta Asavemali
“También llegamos a un acuerdo con la dirigencia de los vendedores para que nos ayuden a no permitir más buhoneros”.
Antonio Rivera
Superintendente Municipal
Hoy continúan los operativos
El titular del departamento de justicia municipal, Fernando Restrepo, informó que los operativos continuarán hoy y mañana en otras calles donde los mismos dirigentes buhoneros sostienen que es donde se ubican los nuevos vendedores.
Tal es el caso de los nuevos puestos ubicados sobre la primera avenida, contiguo a la línea férrea, así como en la seis y siete calles sur, quienes dificultan el paso de los vehículos y transeúntes.
Rivera informó que para impedir la ubicación de nuevos vendedores en las calles de la ciudad, se nombrará una comisión de su dependencia para supervisar el orden que se debe mantener.
Algunos buhoneros defendieron a gritos sus puestos.