Más sectores rechazan reformas que amplían los beneficios a las Zede

TEGUCIGALPA

La polémica sigue abierta, luego de que el Congreso Nacional aprobara exoneraciones y más beneficios para las Zonas de Empleo y Desarrollo Económico (Zede).

El sector empresarial ha cuestionado que las exoneraciones serán una competencia deshonesta para los empresarios nacionales.

“Esas exoneraciones, que representan alrededor de 46,000 millones de lempiras cada año, o sea, impuestos que no va a percibir el Estado, va a aumentar el porcentaje porque estas zonas no van a pagar impuestos sobre la venta e impuestos sobre la renta”, aseguró la expresidenta del Colegio Hondureño de Economistas Liliana Castillo.

Zede Ciudad Morazán En www.morazan.city se promueve como una zede que goza de cierto grado de autonomía fiscal que ofrecerá soluciones residenciales e industriales.

Pero la preocupación de otros sectores de la sociedad no se limita a las exoneraciones, sino a la cesión del territorio y la propia soberanía.

“Las Zede son un atentado a la integridad nacional y del Estado, porque cede la autoridad que tiene, que es soberana, delegada del pueblo hondureño en una unidad territorial administrada por empresarios que van a invertir allí y que supuestamente van a producir para exportar”, declaró Edmundo Orellana, exfiscal general de la república.

Zede Roatán Próspera En www.prospera.hn se informa que es una zona semiautónoma que se construye en Roatán y está anclada en la Constitución de la república.

De acuerdo con Graco Pérez, experto en temas internacionales, las Zede solo son atractivas para el crimen organizado.

“En la situación que está el país solamente son atractivas esas Zede para personas involucradas en el crimen organizado y lavado de activos porque de otra forma el país no es atractivo”, expresó.

En la actualidad se tiene información oficial de la construcción de dos Zedes, una en Islas de la Bahía bajo el nombre Roatán Próspera, un complejo multipropósito en Crawfish Rock y que preveía estar finalizado el año pasado; y la segunda Zede se erige en Choloma y se denomina Ciudad Morazán, la que se construye con una inversión inicial de 100 millones de dólares (2,463 millones de lempiras) que cubrirá la demanda industrial y residencial para los ocho mil obreros que trabajen en los parques que también se erigen.