La crisis hospitalaria se recrudece cada día, producto de la huelga del personal técnico y estudiantes internos.
Ayer se cumplieron ocho días de abandono de las salas de operaciones, laboratorios y consulta externa por parte de los técnicos.
A la fecha se registran 1,500 cirugías suspendidas, según los datos que dio Norma Iris López, vocera de los técnicos en huelga. Agregó que “también se han dejado de hacer entre 800 a 1,000 exámenes de laboratorio de la consulta externa”.
Ante la falta de compromiso con los pacientes, que con sus impuestos pagan estos servicios médicos y los salarios de los manifestantes, surge entre sus dirigentes el discurso de las justificaciones. “Pedimos la comprensión de los pacientes, pero si no es presionando no nos resuelven nada”, dijo la dirigente.
Todas las citas para la consulta externa deberán sacarse de nuevo, y los pacientes tendrán que esperar entre tres y seis meses para poder llegar a su consulta con especialistas. Las cirugías deberán ser reprogramadas también. Además las áreas de hospitalización han sido abandonadas prácticamente por los especialistas y residentes, quienes se han centrado en las áreas críticas.
Gustavo Galo, médico residente de segundo año que estaba de guardia en la emergencia de cirugía de adultos, dijo que el cansancio ya se ha comenzado a sentir en las áreas críticas.
“Solo habemos seis residentes, dos están operando y cuatro estamos atendiendo pacientes, antes eran tres residentes y 21 estudiantes internos, esto es lo que hace que toda la carga la tengamos cuatro médicos para los 24 que habían antes”, explicó. Galo dijo que “los pacientes de consulta externa yo los estoy rebotando y les digo que se vayan para las clínicas periféricas, ahí están los médicos generales, ellos sí están obligados a atenderlos”.
Demanda por negligencia
Las complicaciones de esta huelga ya comienzan a nombrar culpables de las desatenciones.
Familiares de pacientes ya comenzaron a interponer denuncias por negligencia médica.
Este es el caso de Karla García, quien asegura que le dejaron morir a una pariente. “Ella ingresó el lunes 16 de abril, venía de Choluteca, ella se complicó el martes a las ocho de la noche, estaba en el sexto piso, yo bajé a la emergencia de medicina interna a buscar al doctor...
es un residente, y él no me quiso ayudar”, relató.
La mujer asegura tener pruebas contra el médico, y mencionó que “yo fui a buscar a alguien de la DGIC, pero en eso me encontré al fiscal Mauro Solórzano, él subió a ver a la paciente y le dijo al doctor que la fuera a ver o que autorizara para bajarla a la emergencia y tampoco quiso y mi prima falleció”. “Hoy iré a los Derechos Humanos, al Ministerio Público, acudiré a todas las instancias para que le quiten la licencia a este médico negligente y demandaré al hospital Escuela, mi prima deja cinco hijos”, aseguró García.
