Eran las cuatro de la tarde en Chicago y Sanaa Lathan ya llevaba despierta más de doce horas.
Había tomado un vuelo muy temprano de Los Ángeles y luego tuvo que abrirse paso por el tradicionalmente atascado tráfico de Chicago.
Si a eso le sumamos unas entrevistas en la tarde para promover su nueva cinta, The Perfect Guy, además de un par de presentaciones en programas de la televisión matutina para el día siguiente, no es de sorprender que Lathan estuviera visiblemente cansada.
Ni siquiera se había permitido probar una rebanada de la tradicional pizza estilo Chicago. “¡Oh, no, no, no!”, exclama Lathan, mientras desempaca en la habitación de su hotel.
“El estreno de la película ¿Qué más motivación quiere para la dieta? Cuando estamos en un cartel de cine de doce metros de altura necesitamos vernos bien. Si nos van a amplificar tanto, hay que tener las cosas bien controladas. “Y eso no es fácil”, admite riendo, “pues soy apasionada de la comida. Me encantan las cenas, me encanta el vino. Todo es cuestión de equilibrio”.
El apasionante trío de actores que protagoniza “The Perfect Guy” está formado por Michael Ealy, Sanaa Lathan y Morris Chestnut.
|
En The Perfect Guy, Lathan interpreta a Leah, una exitosa cabildera que rompe con su novio de toda la vida (Morris Chestnut) solo para clavarse en una apasionada relación con un encantador extraño (Michael Ealy). “Soy una profesionista y cabildera local que quiere tenerlo todo”, explica.
“Termino la relación con el personaje de Morris, Dave, que es un tipo excelente pero no está dispuesto a comprometerse. A mí se me está pasando el tiempo y pienso que no puedo perder más tiempo”. Ahí es cuando entra Ealy, que encarna al tipo perfecto del título y que, de hecho, quizá sea demasiado perfecto para ser verdad. “Ella conoce a este tipo espléndido y encantador,” continúa Lathan, “y juntos tienen una química increíble.
Es uno de esos romances de torbellino y ella está convencida de que, efectivamente, él es el tipo perfecto”. Pero... agrega, “Lo que pasa es que es demasiado perfecto”, agrega riendo. “Eso debería de ser un indicador en cualquier relación: si alguien es demasiado perfecto... ¡a correr! Ella pronto ve otro lado del temperamento de este extraño. Es una enorme señal de alarma. A partir de ahí las cosas cambian y se produce un efecto de bola de nieve”.
Curiosas
Es difícil no ver la química entre Ealy y Lathan: sus personajes se conocen en un club de baile y terminan en una tórrida escena de amor en el baño. “Esa es una de las ventajas de mi trabajo,” dice la actriz riendo.
“La verdad es que muchas de mis amigas querían ir a visitarme en el plató de esta película. Yo les dije que era curioso que nunca antes hubieran querido visitarme en alguna de mis otras películas. Michael Ealy tiene unos ojos azules penetrantes”, observa Lathan con un suspiro.
“Los veo fijamente en esa escena en el baño, cuando entran en acción en el club nocturno. Es muy sensual, sensual, sensual. ¡En el club!”. No quiere decir que ella lo haría en la vida real. “No fue muy higiénico tener una escena de amor en un baño”, admite Lathan.
“De hecho, requirió de mucha coreografía. Está una besándose con el codo aplastado contra la pared. Y hay que dar la impresión de que la estamos pasando de maravilla”. En cuanto a Ealy, empero, ella no tiene más que buenas cosas que decir. “Es un hombre excelente,” afirma Lathan. “No solo es hermoso por fuera, sino también por dentro. Él tiene los pies bien puestos sobre la tierra. Es sensacional trabajar con él, pues da mucho apoyo”.
Pasión y destino
Después de graduarse de la escuela de teatro de Yale, Lathan inició su carrera en Nueva York haciendo teatro Off Broadway.
“El mío fue un inicio muy lento, pero muy continuo”, indica la actriz. “Nunca olvidaré que mi primera oportunidad fue en un anuncio de desodorante, con lo que pagué la renta durante casi un año. ¡Eso fue maravilloso!”. Lathan se veía en el futuro como estrella de Broadway, pero su padre tenía otras ideas
. “Yo quería concentrarme en el teatro”, precisa, “pero mi papá me dijo que fuera a Los Ángeles a hacer pruebas, que siempre podría regresar a Nueva York”.
De ahí salieron papeles de invitada en programas como In the house (1996), Moesha (1996), Family Matters (1997) y NYPD Blue (1998), así como un trabajo continuo como la voz de Donna Tubbs en Family Guys.
Hizo su debut en la pantalla grande con Drive (1997) y después estuvo en cintas como Blade (1998), Life (1999), Love & Basketball (2000), Brown Sugar (2002), Out of Time (2003), Alien vs. Predator (2004), Something New (2006), Contagion (2011) y The Best Man Holiday (2013).
“De todos mis trabajos, del que más quiere hablar la gente es de Love & Basketball, esa tocó una fibra sensible”. Afirmó Lathan.