El fiscal general Luis Rubí y el fiscal adjunto Roy Urtecho le dieron el beneficio de la duda al informe sobre irregularidades que la comisión interventora presentó ante el Congreso Nacional.
Los fiscales rechazaron tajantemente los señalamientos que les hacen, entre los que se destacan despilfarro de fondos, mal manejo de la investigación de delitos, grupos privilegiados o “argollas” y pérdida de credibilidad en el Ministerio Público (MP).
“A esa información que sale así le voy a dar el beneficio de la duda, aunque ellos (la interventora) estén actuando de buena fe, simple y sencillamente porque creo que se abocaron a las personas que no tienen el conocimiento adecuado y que han ido más con criterios subjetivos y que lógicamente las van a conducir a error”, respondió Rubí.
La interventora cuestiona una falta de liderazgo, de credibilidad, que el MP no coordina con otras instituciones.
Sobredimensión
Rubí dijo que el informe es de índole personal y aclaró que el MP por sí solo no puede dar resultados en las investigaciones.
Por ello buscó coordinaciones para que el MP hiciera su trabajo con lo disponible.
Rechazó que se derroche el presupuesto. A su juicio, el 85% se va en pago de salarios y el resto se destina a pago de alquileres de todos sus edificios, combustibles y compra de materiales.
En torno al arrendamiento de vehículos valorado en unos 10 millones de lempiras, Rubí respondió que el MP solo tiene seis carros blindados.
Calificó de señalamientos intrascendentes las debilidades en la seguridad del personal y los edificios. Son pequeñas deficiencias, hay problemas, pero no de esa dimensión, dijo.
Aclaró que resulta necesario alquilar vehículos por exigencias de los fiscales que los necesitan para ejecutar operativos.
En torno a cuestionamientos por falta de resultados, explicó que al MP jamás se le apoyó con el presupuesto que requiere para investigar delitos, pero los fiscales hacen esfuerzos extraordinarios con lo que tienen. Para el caso, este año se trabaja con un desfase de 125 millones de lempiras.
No renuncia
Roy Urtecho, fiscal general adjunto, afirmó que está seguro de la transparencia de sus actuaciones. “Estamos desempeñando nuestras funciones conforme a lo que el Fiscal General me delegue y conforme a esas acciones estoy seguro de mis acciones”, manifestó. En cuanto al despilfarro del presupuesto, dijo que esperará contar con el informe para responderlo.
Desvirtuó que abuse de vehículos blindados y prueba de ello es que hasta diciembre pasado no le fue asignado carro blindado. Desmintió que tenga asignados 14 vehículos; estos están para toda la Fiscalía Adjunta y para apoya a fiscales.
Urtecho lamentó que, por aclarar esas informaciones, ha puesto en riesgo su seguridad y la de su familia al tener que revelar detalles de su sistema de protección.