“Que Dios me sane es lo que más quiero en esta Navidad”, dijo la pequeña de 11 años Consuelo Vidal.
Consuelito, como cariñosamente la llaman en el albergue, fue abandonada el primer día de nacida y desde entonces la señora Consuelo Alemán la adoptó y la ama como su propia hija.
Doña Consuelo preocupada por la condición de su niña viajó desde El Paraíso, Cópan, hacia el hospital Mario Catarino Rivas hace ocho años y fue ahí donde le diagnosticaron leucemia tipo LLS, uno de los cuatros tipos que existen; Consuelito tiene un diagnóstico esperanzador en condiciones óptimas.
Pero su madre es una mujer de escasos recursos que se gana la vida vendiendo botes para reciclaje y no cuenta con el apoyo de ningún familiar y además tiene problemas del corazón y de azúcar. Consuelito necesitaba una mano amiga y el albergue Fundación Abrigo se la tendió.
Fundación Abrigo fue creada en 2001 con el propósito de brindar un hogar temporal digno a pacientes y familiares de escasos recursos; sin embargo, por ser una fundación sin fines de lucro tienen muchas carencias: las colchonetas de las literas están rotas y no tienen ropa de cama, las cortinas de baño también presentan agujeros y siempre están requiriendo de alimentos y pañales desechables para niños y adultos, jabón y desinfectantes.
La Fundación Abrigo atiende diariamente entre 70 y 80 personas. Para esta temporada navideña y con la idea de brindar esperanza y alegría a sus residentes, Abrigo pretende entregar canastas con productos básicos de alimentos, así como también artículos para el aseo personal y un pequeño bono.
“Fundación abrigo siempre requiere de todas las personas que tengan la voluntad de ayudarnos y de poder dar una esperanza a todas estas personas residentes como pasajeras que necesitan de un hogar”, expresó Ana Lidia Leiva, subdirectora de la fundación.
Si usted quiere unirse para dar una esperanza a los familiares y pacientes del albergue sólo debe llamar al 566 43 58 o depositar en la cuenta de cheques No. 730024511 de Bac/Bamer. Ellos se lo agradecerán.