Quien aspire a ser un miembro de la recién creada unidad élite de la Policía Nacional tiene que ser un funcionario activo del Poder Judicial, del Ministerio Público o de la propia institución uniformada.
Tiene que haber aprobado las evaluaciones sicométricas que acrediten su aptitud, pasar satisfactoriamente las pruebas de confianza y no debe tener antecedentes penales ni disciplinarios vigentes. Debe haber cursado, al menos, la educación media y es fundamental que cumpla con las características físicas y de salud ya establecidas para miembros de la Policía Nacional.
La ley que crea la Unidad Toma Integral Gubernamental de Respuesta Especial de Seguridad (Tigres) fue aprobada la noche del martes y recibió el respaldo de todas las bancadas del Legislativo.
Se calcula que en la primera fase de creación de esta unidad especial 300 elementos se sumarán a la fuerza que enmarcará sus operaciones en la lucha contra el crimen organizado y el terrorismo, aunque también ejecutarán planes preventivos y disuasivos y que asentarán en primera instancia, en San Pedro Sula y Tegucigalpa.
Mando y control
En el dictamen se estableció que el director de Tigres será un oficial activo de la escala ejecutiva con el grado de Comisionado, nombrado por el Director General de la Policía Nacional, y jerárquicamente dependerá de la Subdirección General de la Policía Nacional.
Este director de Tigres será el encargado del mando, control y dirección; con funciones y responsabilidades de administración y gestión operativa del mismo, así como la facultad de aplicar los procedimientos disciplinarios que correspondan a todo su personal, sin perjuicio de las demás funciones contempladas en la presente ley y su reglamento. En caso de ausencia temporal, el director será sustituido por el oficial de mayor grado y antigüedad que le suceda dentro de la unidad.
Pruebas de confianza
Los miembros de Tigres y de la Estrategia Interinstitucional de Seguridad serán sometidos a pruebas de confianza.
Si alguno de estos miembros no aprueba las evaluaciones de confianza, médicas, físicas, psicológicas y patrimoniales, serán separados del Plan Nacional Interinstitucional de Intervención.
Por otra parte, los funcionarios de la Estrategia Interinstitucional percibirán una prima económica adicional de desempeño, por el riesgo inherente a su cargo, consistente en el 30% con base en la asignación salarial básica mensual para cada uno de los grados y cargos.
Además, estos funcionarios y los miembros de la Unidad Tigres, durante su permanencia, gozarán de un seguro de gastos médicos con cobertura familiar a cargo de la Secretaría de Seguridad.
Tecnología de punta
Para la unidad Tigres se prevé la dotación de un equipo logístico de protección, armamento y movilización con tecnología avanzada.
El director general de la Policía Nacional, con el presupuesto asignado, ordenará de manera inmediata la conformación de la unidad Tigres, así como la dotación de uniformes reglamentarios, chalecos antibalas, armamento de dotación, instalaciones adecuadas, parque automotor y equipos de comunicación.
Para este caso podrá pedir auxilio al Consejo Nacional de Defensa y Seguridad a través del Secretario de Seguridad para que se ordene la dotación de equipo requerido al Fideicomiso del Fondo de Seguridad Poblacional.
