Sonia Stephani Iscoa tiene 12 años y ya sabe lo difícil que es hacer el papel de mamá. Sentada en una de las sillas del hospital St. Joseph está pendiente de los gemelos, sus hermanos Omar e Isaac de cinco años.
'Siéntese', 'Cuidado', les dice cuando ve que los inquietos pequeños hacen de las suyas en el lugar. 'Ellos no entienden', los excusa.
Desde que su mamá se fue al hospital, el 17 de abril, ha tenido que asumir el rol en casa.
'Yo lavo la ropa, cocino para los niños, los cuido', dice al hablar de las nuevas obligaciones que tiene además de la escuela.
Stephanie está por pasar el quinto grado y como a cualquier niña de su edad, le gusta jugar y platicar con sus amigas; pero desde el día que mamá ingresó al hospital su vida ha cambiado. Ya no está segura de nada.
Drama
'De las cosas que más me duelen es que el 22 voy a cumplir años y mi mami no va a estar conmigo', dice la niña.
Ella no está segura de qué es lo que a su madre la mantiene en esa cama, pero sí la embarga el temor de ser separada de su lado.
'Me dijeron que la quieren mandar para Honduras, yo no quiero que se la lleven, con quién vamos a vivir', pregunta.
Por ahora la familia se ha separado. Juan, de 10 años, se fue a vivir con su papá.

Sonia Iscoa es una mujer fuerte. No se da por vencida, ya se recuperó de un coma y pregunta por sus hijos.
En la escuela se han solidarizado con su caso.
'Las maestras me dijeron que nos quieren ayudar, vamos a poner una cajita para recolectar dinero y darlo al hospital. Cuando ellas me ven triste me dicen que no llore, que todo va a estar bien; pero no sé', admite la pequeña
LO DIJO
'Ya pedimos un informe detallado del caso de Sonia Iscoa al Hospital, pero no hemos tenido respuesta. Ellos no pueden deportar a una persona que está amparada en el TPS'.
Nora Montoya
Cónsul de Honduras en Phoenix

Los Iscoa son una familia bastante unida. Los hijos suplican para que no se lleven a su mamá a Honduras.