Padece una rara enfermedad a la cual los doctores denominan “cara de pájaro”. La pequeña Maryuri Briyi Linares tiene ocho años de edad y aparenta sólo cuatro.
La niña santabarbarense necesita ayuda para crecer y tener una estatura que corresponda a su edad.
Científicamente esta condición que sufre se conoce como el síndrome de Seckel.
¿Qué es específicamente? es una enfermedad hereditaria extremadamente rara, descrita así en 1960. Se caracteriza por crecimiento intrauterino retardado, que produce un bajo peso al nacer.
El retraso del crecimiento continúa en la etapa postnatal y provoca baja talla, es decir, enanismo. Otras características físicas asociadas son microcefalia, rasgos faciales característicos como la nariz en picocorno y ojos anormalmente grandes, orejas malformadas y mandíbula pequeña.
Historia
Mayuri nació el 4 de agosto de 1998, en Quebradita, Petoa, Santa Bárbara. Ella caminó a los 29 meses de nacida. Su madre es Trinidad Susana Mercado, de 32 años y su padre, Rafael Linares de 37. Tiene tres hermanos: Paola Beatriz, 13, Henry Eleazar, 14 y Marlon Rafael Linares, de 10 años, la estatura de ellos es normal, no padecen la enfermedad.
La vida de Maryuri es normal, así como cualquier otra niña de su edad. Aunque no asiste a la escuela, se divierte jugando muñecas con niñas de cuatro, cinco y hasta diez años, comenta su madre.
Los hermanos de Maryuri estudian en una escuela de Santa Bárbara. A la pequeña, le da clases su tío Pablo, pues él es profesor y llega a la casa a enseñarle. “Maryuri pone mucha atención”, comenta su madre.
Medidas
“La pequeña tiene la talla de una niña de cinco años y el peso de una de tres años y medio. La estatura es de 1.06 cm.”, explicó el doctor Jorge Villacorta, especialista del Mario Rivas, que atendió a la niña. La estatura no es impedimento para soñar, quiere ser cantante. Admira a Shakira.
“Siempre que la ve en la televisión se pone a bailar, tratando de imitarla. Busca palos u otro objeto que sirvan para hacer ruido y empieza a cantar”, expresó su padre.
Diagnóstico clínico
El especialista Jorge Villacorta dijo que ella ingresó al Rivas por un absceso, pero al ver el físico de la niña se interesaron en hacerle los exámenes para comprobar la enfermedad.
El endocrinólogo óscar Zúñiga está en toda la disposición de ayudar a la pequeña para que crezca, inyectándole la hormona de crecimiento que se le debe aplicar cada mes.
Sus padres esperan la solidaridad de las personas para comprar el medicamento.
Urge
El medicamento que puede ayudar a que Maryuri crezca tiene un valor aproximado de dos mil lempiras mensuales.
Para ayudar
922-3962
Pablo Mercado
Es el número de celular del tío de Maryuri para que las personas puedan ayudarla.
Condición
33
Libras
Es el peso actual de la pequeña, inadecuado para alguien de su edad.