Miembros de la bancada liberal en el Congreso Nacional anunciaron ayer que están dispuestos a unirse a los 25 congresistas nacionalistas de la Alianza Parlamentaria de la Dignidad para lograr mayoría en el Poder Legislativo.
Los 25 diputados decidieron separarse de la bancada azul, arguyendo que son discriminados; es más, a partir de ayer crearon su propia “bancadita” que presidirá un representante del movimiento del alcalde capitalino Ricardo Álvarez y otra del ministro de Soptravi, Miguel Pastor.
El diputado Antonio Rivera Callejas, miembro de la Alianza, manifestó que ni siquiera atenderían una invitación del presidente del Congreso, Juan Orlando Hernández, para dialogar mientras no platiquen primero con el presidente Porfirio Lobo.
Mayoría simple
El diputado liberal Wenceslao Lara mostró su apoyo a la Alianza Parlamentaria por la Dignidad, pues dijo que este grupo, unido a los liberales lograrían una mayoría simple en el Congreso Nacional.
“De todo mundo es sabido que como liberales hemos estado en desventaja numérica y que todas las leyes se han aprobado con esa aplanadora que tenía el Partido Nacional. Ahora, con esta alianza, ese partido pierde su mayoría”, manifestó Lara.
Agregó que podía hablar por unos 25 diputados liberales que analizan un acuerdo para hacerse notar en el Congreso Nacional.
Al preguntarle si los liberales apoyarían la alianza parlamentaria de los 25, manifestó que “sí, como liberales estamos dispuestos a apoyarlos, siempre que sea para beneficio del pueblo hondureño por medio de leyes o proyectos que se presenten en el Congreso Nacional”.
“Nos vamos a apoyar mutuamente los liberales y los de la alianza parlamentaria”, aclaró Lara, añadiendo que no compartirán nada que perjudique al pueblo hondureño.
Tercera fuerza
La Alianza Parlamentaria por la Dignidad se constituye en la tercera fuerza política en el Congreso Nacional, dijo ayer el diputado nacionalista por Atlántida, Daniel Flores.
Añadió que no pretenden confrontar al presidente del Congreso, pero denunció que tienen reportes de varios empleados en las instituciones públicas que son amenazados con despidos si no se identifican con las corrientes, lo que calificó como “inaceptable”.
El diputado Mario Alexander Barahona recordó que el jefe de la bancada Celín Discua, además de llamarlos “traidores”, ha sido incapaz de tener una actitud conciliadora y de reciprocidad hacia ellos.