24/06/2025
10:38 PM

Las claves 2009

  • 29 diciembre 2009 /

El 29 de noviembre los hondureños le dieron un ejemplo de democracia al mundo al acudir masivamente a las urnas. Con las elecciones se le puso fin a la crisis política.

Roberto Micheletti asume la presidencia tras destitución de Manuel Zelaya

El 28 de junio, el entonces presidente de Honduras, Manuel Zelaya Rosales, fue detenido por fuerzas militares y trasladado a Costa Rica.

El Congreso Nacional aprobó su destitución y nombró a Roberto Micheletti como nuevo mandatario del país. Micheletti, en su condición de presidente del Legislativo, era según la Constitución quien debía concluir el mandato de Zelaya.

Con un 'viva la democracia' y en medio de vítores y aplausos de 124 de los 128 diputados presentes en el hemiciclo legislativo, Micheletti asumió el cargo que desempeñará hasta el 27 de enero.

Micheletti en su primer discurso como Presidente se comprometió a garantizar elecciones generales libres el 29 de noviembre, lo cual cumplió a cabalidad.

'Lo que hubo aquí fue un acto democrático, porque nuestro Ejército sólo cumplió lo que le ordenó la Fiscalía y la Corte Suprema de Justicia', señaló el progreseño al referirse a la detención y expulsión de Zelaya hacia Costa Rica.

Previo a esa fecha que significó un antes y un después en la historia de Honduras, ocurrieron varios hechos que propiciaron la destitución de Zelaya y que se desarrollaron en los tres años de gobierno que presidió.

Desde el 22 de noviembre de 2008, Zelaya propuso un plebiscito para instalar una Asamblea Nacional Constituyente. A partir de esa fecha, la Constituyente fue el tema central de todos sus discursos en las asambleas de Poder Ciudadano que celebraba en todo el país.

Pero fue en marzo de 2009 que Zelaya emitió el decreto ejecutivo número PCM-005-2009 para realizar en junio una consulta popular en la que se le iba a preguntar a la población si estaba de acuerdo con que se colocará una cuarta urna en las elecciones del 29 de noviembre en la que se iba a consultar si se llamaba o no a una Constituyente. El decreto fue publicado en el Diario Oficial La Gaceta. En mayo, los tribunales de justicia ordenaron suspender la consulta y el Ministerio Público denunció la ilegalidad del decreto que llamaba a la Constituyente y pese a ello el ex mandatario siguió con su proyecto.

En junio, Zelaya destituyó al jefe de las FFAA, Romeo Vásquez, por negarse a repartir el material de la cuarta urnas. Un día después, el Congreso Nacional improbó la destitución de Vásquez, ordenó su restitución en el cargo y dispuso la formación de una comisión investigadora sobre el proceder de Zelaya.

El material para realizar la encuesta popular se encontraba en la base aérea de Tegucigalpa hasta donde llegó Zelaya acompañado de varias personas a sacar el material y distribuirlo en todo el país. El 27 de junio, Zelaya y su equipo distribuyó las urnas para la encuesta de opinión del domingo, a pesar de una orden judicial en contra, y un día después fue destituido como Presidente de la República. En esa fecha arrancaron los toques de queda.

La OEA sanciona a Honduras y la expulsa

Los Presidentes de los países que conforman la Alianza Bolivariana para las Américas, Alba, retiran a sus embajadores del país y Roberto Micheletti acusa al mandatario de Venezuela, Hugo Chávez, de tener una 'clara y definida' injerencia en la vida política de la nación.

Estados Unidos ordenó reducir la ayuda militar a Honduras y en la OEA se produjo una condena unánime y señalan que el 28 de junio hubo un golpe de Estado en Honduras.

Cabe señalar que los cancilleres de la OEA liderados por el secretario general, Miguel Insulza, condenaron a Honduras sin haber escuchado argumentos y sin siquiera conocer que la Constitución de la República inhabilita automáticamente a las personas que pretendan modificar la Carta Magna. En los primeros días de julio, Insulza visita a Honduras, pero lo hace prejuiciado, sin escuchar a las autoridades hondureñas y presionando por la restitución de Zelaya.

Micheletti cuestiona a la OEA, dice que se mantendrá firme y anuncia la extensión de los toques de queda. Hay varios heridos y detenidos tras enfrentamientos entre manifestantes afines al ex Presidente y fuerzas del orden. El 4 de julio la OEA determina la suspensión de Honduras.

Zelaya ratificó en ese foro que iba a retornar en breve al país, pero Insulza advierte que el retorno conlleva 'riesgos' y considera conveniente conseguir 'garantías' antes de que viaje.

El ex gobernante pretende aterrizar el domingo 5 de julio en un avión venezolano en el aeropuerto de Toncontín. Viaja en compañía del presidente de la Asamblea General de las Naciones Unidas, Miguel D’Escoto; pero las autoridades hondureñas se lo impidieron.

Arias intenta mediar en la crisis, pero no tiene éxito

El 10 de julio, el presidente costarricense Óscar Arias, actuando como mediador del conflicto, recibe en su casa de San José a Roberto Micheletti y a Manuel Zelaya, con quienes se reunió por separado, pero no logró sentarlos en la misma mesa para buscar acuerdos y superar la peor crisis política en Centroamérica en dos décadas. Ocho días después, el Gobierno interino hondureño rechaza el plan de Óscar Arias para que el depuesto Manuel Zelaya regrese a Casa Presidencial y continúe hasta enero al frente de 'un gobierno de unidad y reconciliación nacional compuesto por representantes de los principales partidos políticos'.

La comisión de Zelaya da por fracasado el diálogo. El 22 de julio se reanudan ‘in extremis’ las negociaciones sobre la crisis de Honduras.

El nuevo plan de once puntos propuesto por Arias tampoco logró convencer a las partes. Zelaya había advertido, dos días antes que Arias los recibiera en el vecino país centroamericano, que el diálogo en Costa Rica no se trataba de 'negociaciones', sino de una 'plataforma de retiro para los golpistas' y su restitución.

Meses después, Arias califica la Constitución de Honduras como 'un adefesio' y la 'peor del mundo' y una semana después de las elecciones reconoce la transparencia de éstas y anuncia que reconocerá al gobierno de Porfirio Lobo Sosa.

Mel Zelaya permanece doce días en la frontera con Nicaragua

El 24 de julio, el ex mandatario llegó desde Nicaragua hasta la frontera con Honduras y la cruzó brevemente acompañado de decenas de seguidores. Inmediatamente regresó a Nicaragua. El 25 de julio Zelaya vuelve a la frontera y dice que acampará en ella.

24 horas después, Zelaya anuncia que se instala indefinidamente en la frontera de Nicaragua con Honduras para organizar con sus simpatizantes una 'resistencia pacífica' para internar retornar al país.

En ese mismo mes, Estados Unidos revoca los visados diplomáticos a cuatro altos funcionarios hondureños por su apoyo a la destitución de Zelaya.

El 31 de julio, el Gobierno interino levanta el toque de queda de varias horas que mantenía prácticamente ininterrumpido desde el 28 de junio, con la excepción de la zona fronteriza con Nicaragua, adonde se siguió aplicando la medida. Un juzgado de Tegucigalpa ordena la captura de Zelaya por falsificación de documentos y otros delitos. Tras permanecer casi doce días en la frontera, generando un ambiente de zozobra en la población por la excesiva seguridad y los toques de queda que se mantenían, el ex Presidente por fin abandona definitivamente la frontera entre Nicaragua y Honduras, pero amenaza con regresar al país.

Zelaya se refugia en la embajada de Brasil

El 21 de septiembre, Manuel Zelaya anuncia que se encuentra en Tegucigalpa en la embajada de Brasil.

Antes de su intempestiva llegada, el ex gobernante fue recibido en México con honores de jefe de Estado; sin embargo, provoca un incidente que causó malestar en el presidente Manuel Calderón al mandarle un mensaje a Andrés Manuel López Obrador: 'En estos países es mejor sentirse Presidente que serlo y eso se lo digo a López Obrador que está escuchando'.

Luego Zelaya viaja a Brasil y a Chile. En Perú su visita no tiene mayores protocolos porque es considerada de trabajo.

Una misión de cancilleres de la OEA llega a Honduras con Insulza como observador y un día después arranca la campaña política en Honduras.

El 16 de septiembre, antes de que Zelaya apareciera en Honduras, cinco candidatos a la Presidencia de Honduras se reunieron en San José con el presidente óscar Arias. Cuatro de ellos se comprometieron a impulsar una solución negociada a la crisis política. Al hacer el anuncio de que se encuentra en la embajada de Brasil en Tegucigalpa, militares y policías rodean el inmueble, mientras el ex mandatario proclama ante sus seguidores 'patria, restitución o muerte'.

El presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, pide a las autoridades hondureñas aceptar una solución 'negociada' y que se permita el retorno al poder de Zelaya.

Mientras eso ocurre, los hondureños siguen pidiendo la no injerencia de Hugo Chávez en el país a través multitudinarias marchas que se realizan en distintas ciudades. Los grupos zelayistas, en cambio, cometen actos vandálicos y saqueos en negocios.

Se restringen libertades en el país para evitar desorden

El gobierno de Micheletti firma un decreto que autoriza, entre otras cosas, el cierre de medios de comunicación que atenten contra la paz y el orden público y la disolución de reuniones no autorizadas.

Cinco miembros de la OEA son 'detenidos' seis horas después de su llegada al aeropuerto de Tegucigalpa y cuatro de ellos expulsados del país.

El retorno de Zelaya a su país fue 'irresponsable e idiota', declara el representante alterno de Estados Unidos ante la OEA, Lewis Amselem, durante un debate. El Consejo Permanente de la OEA no logró un consenso para efectuar una declaración sobre Honduras dos meses después que Zelaya llegó clandestinamente a la embajada de Brasil en Tegucigalpa.

Candidatos buscan una salida a la crisis política de Honduras

Los entonces candidatos presidenciales, Porfirio Lobo Sosa, del Partido Nacional; Elvin Santos, del Liberal; Bernard Martínez, del Pinu, y Felícito Ávila, de la Democracia Cristiana, se reunieron con Manuel Zelaya en la embajada de Brasil.

La intención de los cuatro candidatos era que el presidente Roberto Micheletti, así como el destituido Zelaya, tuvieran un acercamiento para terminar con el conflicto que mantenía en zozobra al país.

Si la crisis se solventaba, la comunidad internacional iba a reconocer las elecciones y al ganador de las mismas.

La posición asumida por Lobo, Elvin, Felícito y Bernard le dio un espaldarazo a la institucionalidad del país y a la democracia.

Porfirio Lobo se convierte en presidente de los hondureños

En las elecciones más votadas de la historia democrática de Honduras y de forma contundente y con amplia mayoría, Porfirio Lobo se convirtió en el presidente electo de Honduras para el periodo 2010-2014.

Luego de una crisis política, el aislamiento internacional y los intentos de intervención de Gobiernos, como el de Venezuela, los hondureños dieron al mundo una cátedra de democracia y un claro reproche al intervencionismo extranjero en los problemas del país.

El Tribunal Supremo Electoral, TSE, de Honduras declaró la semana pasada Presidente electo del país a Porfirio Lobo, del opositor Partido Nacional, fuerza que gozará de una amplia mayoría en el Parlamento gracias a su abultado triunfo en las elecciones del 29 de noviembre pasado.

El TSE acordó 'declarar electo como Presidente constitucional de la República de Honduras por un período de cuatro años, que empezará el 27 de enero de 2010 y terminará el 27 de enero de 2014, al ciudadano Porfirio Lobo', según la resolución leída por su presidente, Saúl Escobar.

Además, declaró electos como designados presidenciales a María Antonieta Guillén Vázquez, Samuel Armando Reyes Rendón y Víctor Hugo Barnica Alvarado.

El Partido Nacional tendrá 71 de los 128 escaños del Congreso Nacional; el Liberal, 45; la Democracia Cristiana, cinco; Unificación Democrática ,UD, cuatro, y el Partido Innovación y Unidad-Socialdemócrata, Pinu, tres.

El Partido Nacional también contará con diez de los 20 diputados hondureños en el Parlamento Centroamericano; el Partido Liberal tendrá siete y los tres partidos minoritarios uno cada uno.

Porfirio Lobo dijo que no va a permitir que el presidente venezolano, Hugo Chávez, ni nadie 'se atreva a meter las narices' en Honduras un día después de haber sido electo presidente de los hondureños.

EUA elogia transparencia de elecciones

Después de estudiar minuciosamente la Constitución hondureña, los miembros que conforman la Biblioteca Legal de Estados Unidos concluyeron que la destitución de Manuel Zelaya de la Presidencia y el nombramiento de Roberto Micheletti como su sustituto fueron acciones enmarcadas en ley.

Una vez que se consumó el fracaso de Óscar Arias como mediador, el subsecretario de Estado de EUA, Thomas Shannon, arribó al país para destrabar la crisis y resolvió que el Congreso iba a decidir el futuro de Zelaya.

El 30 de noviembre, Ian Kelly, portavoz del Departamento de Estado, elogió la transparencia de las elecciones y felicitó al pueblo hondureño por su asistencia masiva a las urnas. 'La participación parece haber sido más elevada que en la última elección presidencial. Eso demuestra que, dada la oportunidad de expresarse, el pueblo hondureño entendió la elección como una parte importante de la solución a la crisis política que atraviesa su país', añadió Kelly.

Michelleti se retira temporalmente de la presidencia

El presidente Roberto Micheletti anunció en cadena nacional que dejará temporalmente el cargo desde el 25 de noviembre para regresar el 2 de diciembre, cuando el Congreso se reúna para decidir la restitución o no de Manuel Zelaya.

'Me retiro para permitir que los hondureños se enfoquen en las elecciones', aclaró. Micheletti se trasladó a El Progreso, ciudad de la cual es originario.

Precisamente en la semana previa a los comicios, la Policía investigó un presunto plan para atentar contra Micheletti en el centro educativo donde le iba a tocar ejercer el sufragio.

Los agentes realizaron un operativo en el centro de El Progreso, en el que decomisaron un arsenal.

Entre las armas incautadas se encontraban un misil con mira telescópica, un fusil de asalto AK-47, un equipo de radiocomunicación y computadoras.

CN ratifica por mayoría destitución de Manuel Zelaya

El 2 de diciembre, el Congreso Nacional llevó a cabo una sesión histórica y, por mayoría, consignando los nombres y muchos diputados razonando su voto, ratificaron la destitución de Manuel Zelaya. Con una votación de 111 votos en contra de la vuelta del ex Presidente a la titularidad del Ejecutivo y 14 a favor quedó claro el rechazo a la restitución. 111 parlamentarios dejaron claro que Zelaya fue destituido sustituido de forma legal. Los diputados aprobaron una moción por la que ese poder del Estado 'ratifica en todo y cada una de sus partes lo actuado en la sesión del 28 de junio del presente año', en que fue separado de la Presidencia de la República Zelaya Rosales.

Tras una larga votación que los diputados hicieron individualmente y a viva voz, el Congreso cumplió con el papel que le otorgaba el Acuerdo Tegucigalpa-San José para determinar la restitución o no de Zelaya. Los diputados conocieron los informes vertidos por la Procuraduría, Ministerio Público y la CSJ.

Zelaya quería irse como huésped y no como asilado

Ocho días después de la decisión del Congreso Nacional de no restituir a Zelaya en la Presidencia, la Cancillería abortó el viaje que el expresidente Zelaya pretendía realizar a México en calidad de 'huésped distinguido' y no como asilado político. La anunciada salida del ex Presidente de la embajada de Brasil el martes 8 de diciembre generó una gran movilización de periodistas nacionales e internacionales al lugar donde se encuentra refugiado.

El canciller Carlos López Contreras explicó que 'se le denegó el salvoconducto de salida a Zelaya porque era improcedente'. El Gobierno mexicano, a través de su canciller Patricia Espinoza, aseguró un día después del fallido viaje de Zelaya que ya no había posibilidades de acoger al ex Presidente en su país.

Zelaya dijo que no estaba dispuesto a salir del país con un salvoconducto.