Decir adiós a un ser querido que ha fallecido y aceptar la idea de nunca más tenerlo cerca es una de las cosas más difíciles de hacer o a veces incluso... imposible.
Así lo fue para varios misquitos, familiares de las víctimas que se ahogaron en el hundimiento del barco Capitán Waly este 3 de julio en el mar Caribe.
Se puso a disposición de los misquitos la posibilidad de enterrar los cadáveres en el cementerio, pero ellos rehusaron.
84 % de los habitantes en Puerto Lempira se autodenominan como miembros de algún grupo étnico y solo 16% como mestizo o blanco.
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“Quiero tener a mi hijo cerca. No queremos que esté en otra parte, por eso lo enterramos al lado de nuestra casa”, relató Fidel Castellón, padre de Rolando Castellón, quien murió durante el naufragio frente a las costas de La Mosquitia.
Al igual que ellos, otros misquitos que perdieron a sus parientes en la desgracia marítima enterraron los restos junto a donde residen.En los alrededores de varias chozas en la comunidad de Yahurabila y de Cauquira se puede ver la tierra abultada de los sepulcros hechos al lado de las casas.
Costumbres. Misquitos cercaron y adornaron a su manera las tumbas de sus seres queridos.
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Un ejemplo es la tumba de Rolando Castellón al que en la cruz le escribieron Lorando, algo que los humildes misquitos ni siquiera notan, pues muchos no saben leer ni escribir.
Algunos pusieron un cerco para mantener inmaculadas las tumbas.María Teresa Álvarez, hermana del fallecido Jony Álvarez, relató que también optaron por sepultarlo cerca de la casa.
“Decidimos que se quedara cerca de nosotros y por eso lo enterramos a poca distancia de nuestra casa. No queríamos tenerlo lejos”, dijo.
Diario LA PRENSA recorrió La Mosquitia
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Aldrin Paman fue otro de los ahogados en el hundimiento que fue sepultado cerca de donde viven sus familiares.
Elinia Paman, hermana de la víctima, contó que aún no pueden creer lo sucedido. “Cuando nos avisaron de lo que pasó creímos que podía haber quedado vivo; pero después la gente empezó a decir que estaba entre los que habían muerto. A veces todavía parece mentira, pero la verdad es que se lo llevó esa desgracia”, indicó.