Tegucigalpa, Honduras
El fiscal federal Emil J. Bove, en carta enviada al juez Paul G. Gardephe, quien dirige el proceso judicial contra Fredy Renán Nájera Montoya en la Corte del Distrito Sur de Nueva York, solicitó una orden de protección a la documentación a la que tendrá acceso el defensor del hondureño para prepararse en el juicio que se tiene previsto iniciará el 10 de diciembre.
| Sépalo
Los Cachiros vinculan al exdiputado Nájera en el asesinato del Zar Antidrogas Julián Arístides González.
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El expediente del diputado liberal contiene 3,500 documentos que han sido aportados tanto por la Fiscalía como la defensa de Nájera, representada por Víctor E. Rocha, a quien Nájera solicitaba abandonara su defensa, pero el juez determinó que debía continuar en el caso.
La petición de la Fiscalía se ampara en las leyes de Jencks y Giglio, que permiten que el material que sirve de evidencia en el curso del juicio, como documentos aportados por testigos del gobierno o testimonios, cuenten con las garantías de confidencialidad para evitar la difusión de un material considerado clave en el proceso.
La petición de protección fue aceptada por Víctor Rocha, quien dio su consentimiento a esa orden, mediante un correo electrónico que envió el pasado martes al juez Gardephe.
Información sensible
La información contenida en el voluminoso expediente contiene información sensible que implica a terceros en investigaciones en curso que se hicieron tanto en Honduras como en otros lugares, asegura la Fiscalía.
| Operación Agalta
Permitió la incautación de varios bienes muebles e inmuebles de Fredy Nájera.
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De acuerdo con los fiscales, esta información podría generar actos reales y amenazas de violencia contra las víctimas cuyas identidades no son actualmente públicas.
“Se da el consentimiento de analizar la documentación solicitada siempre y cuando el acusado Fredy Renán Nájera Montoya, a través de su abogado Víctor E. Rocha y los asistentes legales, investigadores e intérpretes de los Estados Unidos, que trabajen para el acusado o el abogado Rocha, no transportar ni transmitir ninguno de los 3,500 documentos fuera de los Estados Unidos” señala el documento que se adjunta en la solicitud de la orden de protección.
Es petición incluye que la parte defensora no podría mostrar ni difundir ninguno de los documentos a nadie más que al acusado, esto incluye que antes, durante o después del juicio ni Fredy Renán Nájera Montoya ni Víctor Rocha poseerán ninguno de los documentos después de la revisión que se hará para la preparación previa al juicio.
Al finalizar la revisión de la extensa documentación esa documentación deberá regresar a la Fiscalía, quien una vez terminado el juicio o cuando se concluya cualquier apelación que se presente y la resolución sea definitiva se destruirá.
“En caso que el abogado defensor solicite autorización del Tribunal, mediante notificación a la Fiscalía para proporcionar documentos específicos a personas cuyo acceso a dichos materiales est? prohibido por la presente orden, deberá justificar si la acción es necesaria e imprescindible para la preparación de la defensa del caso”, señala la nota que la Fiscalía envió al juez Gardephe.
El juicio. A menos de un mes para el desarrollo del juicio, Fredy Renán Nájera obtiene toda la información previa para sustentar la defensa.
Desde su entrega en marzo a las autoridades norteamericanas, ha aportado información confidencial que figura dentro de los acuerdos de negociación para bajar la pena que por los tres cargos que le ha formulado la Fiscalía pudiera dictársele en el juicio.
Según la Fiscalía de New York, el acusado colaboró y cooperó con los carteles y tuvo alianzas con personas muy importantes para el cartel de Sinaloa, en México, a quienes les facilitó el paso de la droga que llegaba de Suramérica hacia Gracias a Dios y Olancho.
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 La carta enviada por el fiscal Emil Bove al juez Paul G. Gardephe en la que le solicita la orden de protección a los documentos que amparan el juicio.
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