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'Estamos construyendo el nuevo sistema carcelario del país”: JOH

  • 16 mayo 2017 /

24 cárceles hay en el país. En su mayoría, los presos están hacinados; por ejemplo, en Puerto Cortés, La Ceiba y El Progreso.

    Tegucigalpa, Honduras.

    El presidente Juan Orlando Hernández resaltó ayer el éxito de la operación Arpía III, que permitió el traslado de al menos 773 peligrosos reclusos de las pandillas 18 y la Salvatrucha a La Tolva, en Morocelí, El Paraíso, mejor conocido como el Pozo 2.

    El mandatario compareció al cabo de la jornada para rendir un informe pormenorizado del operativo junto con los responsables de las Secretarías de Defensa y Seguridad.

    Detalló que en Arpía III participaron alrededor de 3,000 elementos, 245 vehículos y cinco aeronaves y fue producto de la estrategia integral de la política de seguridad del Estado.

    Destacó que en el operativo se utilizó moderna tecnología de comunicación y vigilancia que una vez más demuestra las modernas capacidades con que cuenta el Estado por medio de la Fuerza de Seguridad Interinstitucional Nacional ( Fusina).

    “El sistema penitenciario entra en una etapa de reestructuración y el sistema carcelario ya empezó, va en camino y continúa. Vamos a evitar que desde los centros penales se siga planificando este tipo de crímenes que le han hecho mucho daño a la población”, acotó el Presidente.

    Indicó que gracias a la Tasa de Seguridad y al compromiso de los operadores de justicia se ha podido avanzar en la consolidación del sistema carcelario del país.

    “Estos privados de libertad al darse cuenta de que ante este nuevo sistema carcelario no podrán hacer lo que ellos quieran han entrado en una etapa de desesperación”, manifestó. Hernández recordó que desde el 22 de febrero que se aprobaron las reformas penales y desde que comenzó el traslado de reos, las tasas de homicidios bajaron hasta en un 17% en comparación con el año anterior.

    “Lo que ha ocurrido en San Pedro Sula es una prueba irrefutable de que los centros penales, además de haberse convertido en escuelas del crimen y centros de operaciones, también han servido como refugio de estos delincuentes, que entraban y salían cuando querían”, dijo.

    Es por eso –enfatizó- que “estamos aquí para actuar, y es lo que hemos hecho con el equipo de Fusina, por eso estos presos al darse cuenta de que bajo este nuevo orden de cosas no podían seguir a sus anchas haciendo lo mismo han entrado en desesperación”.

    En ese sentido agregó que algunos se han fugado y otros han intentado fugarse, pero no se puede ser ingenuos pensando que no habrá otros intentos u otro tipo de reacciones, por tanto se tiene que estar preparado y en alerta porque esta gente está en un estado de desesperación y son capaces de hacer cualquier cosa.

    “Estamos construyendo el nuevo sistema carcelario del país, estamos avanzando. Va a haber reacciones, pero no podemos retroceder ni un tan solo milímetro”, añadió el titular del Ejecutivo.