San Pedro Sula, Honduras.
Un movimiento sin fines de lucro y cuyo fin es ayudar a los más necesitados se levanta en San Pedro Sula y busca llegar a cada rincón de Honduras para contagiar de esperanza a la población.
“Dios es Real” es la iniciativa que ha surgido desde una iglesia evangélica, pero que abre los brazos a todos sin distinción de iglesia o religión.
Los que deseen conocer más de este movimiento pueden asistir el sábado a las 4:00 pm al gimnasio del estadio Olímpico Metropolitano, donde se realizará la primera concentración.
El pastor Alejandro Espinoza, líder de la iglesia “El Shaddai”, detalló que el movimiento no abandera a ningún ministerio sino que busca integrar a los hondureños que sientan en su corazón el deseo de hacer el bien y llevar un mensaje cristiano de forma integral.
“Este sábado tenemos una concentración del movimiento “Dios es Real”. Lo tradicional es decir Dios te va ayudar, ¿pero a través de quién? Creo que ha llegado el momento que Honduras necesita. La gente no solo quiere Biblia bajo el brazo. Es un movimiento para que los que no crean por la fe crean por las obras. Una fe que obra, que es práctica, sencilla y espontánea”, dijo.
Actividades
Las personas que pertenecen al movimiento realizan diferentes actividades. Además de llevar el mensaje de la palabra de Dios este movimiento entrega ayuda en los hospitales, casas de refugio, personas en la calle y otros.
Espinoza dijo que las actividades surgieron el pasado 15 de septiembre donando en los desfiles 25 mil bolsas de agua fría, pero las acciones más enriquecedoras han sido en los hospitales Leonardo Martínez y Mario Catarino Rivas, donde han podido ayudar a madres que han dado a luz y atender también a los parientes de los enfermos.
“Fue una experiencia especial el poder aportar. Tenemos entre 500 y 1,000 personas involucradas y en redes sociales más de seis mil. El hondureño o sampedrano que se pone la camiseta de “Dios es Real” lo hace para servir”, apuntó el líder evangélico.
El movimiento busca fortalecer las familias, transformar la vida de los jóvenes, contribuir en el área de salud y en la prevención de la violencia.
Un movimiento sin fines de lucro y cuyo fin es ayudar a los más necesitados se levanta en San Pedro Sula y busca llegar a cada rincón de Honduras para contagiar de esperanza a la población.
“Dios es Real” es la iniciativa que ha surgido desde una iglesia evangélica, pero que abre los brazos a todos sin distinción de iglesia o religión.
Los que deseen conocer más de este movimiento pueden asistir el sábado a las 4:00 pm al gimnasio del estadio Olímpico Metropolitano, donde se realizará la primera concentración.
El pastor Alejandro Espinoza, líder de la iglesia “El Shaddai”, detalló que el movimiento no abandera a ningún ministerio sino que busca integrar a los hondureños que sientan en su corazón el deseo de hacer el bien y llevar un mensaje cristiano de forma integral.
“Este sábado tenemos una concentración del movimiento “Dios es Real”. Lo tradicional es decir Dios te va ayudar, ¿pero a través de quién? Creo que ha llegado el momento que Honduras necesita. La gente no solo quiere Biblia bajo el brazo. Es un movimiento para que los que no crean por la fe crean por las obras. Una fe que obra, que es práctica, sencilla y espontánea”, dijo.
 El pastor Alejandro Espinoza dijo que el Movimiento “Dios es Real” es inclusivo y no exclusivo.
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Las personas que pertenecen al movimiento realizan diferentes actividades. Además de llevar el mensaje de la palabra de Dios este movimiento entrega ayuda en los hospitales, casas de refugio, personas en la calle y otros.
Espinoza dijo que las actividades surgieron el pasado 15 de septiembre donando en los desfiles 25 mil bolsas de agua fría, pero las acciones más enriquecedoras han sido en los hospitales Leonardo Martínez y Mario Catarino Rivas, donde han podido ayudar a madres que han dado a luz y atender también a los parientes de los enfermos.
“Fue una experiencia especial el poder aportar. Tenemos entre 500 y 1,000 personas involucradas y en redes sociales más de seis mil. El hondureño o sampedrano que se pone la camiseta de “Dios es Real” lo hace para servir”, apuntó el líder evangélico.
El movimiento busca fortalecer las familias, transformar la vida de los jóvenes, contribuir en el área de salud y en la prevención de la violencia.
