San Pedro Sula, Honduras.
Las autoridades del Instituto Nocturno Julio Reyes Caballero, ubicado en al colonia La Pradera se encuentran preocupadas porque la deserción en el centro aumentó drásticamente este año.
La inseguridad que impera en la ciudad y la migración de los jóvenes hacia los Estados Unidos han hecho que la población estudiantil bajara.
“De 415 alumnos que se matricularon al inicio, tenemos registrado que 124 han salido del centro”, dijo la directora Silvia Hernández.
La titular del centro pide a la Secretaria de Educación que les ayuden con la creación de una nueva oferta educativa o implementar la jornada diurna en el colegio.
“Nosotros no tenemos presupuesto para crear una nueva carrera, necesitamos apoyo de la Secretaría con la estructura presupuestaria necesaria para la creación de las carreras o para abrir una nueva jornada”, explicó.
Por su parte, los estudiantes realizan visitas a las escuelas para ofrecer a los estudiantes las carreras que tiene el colegio, como parte de su Trabajo Educativo Social.
“Hemos luchado para que no cierre la jornada nocturna, necesitamos apoyo de la Secretaría”, indicó la docente.
El colegio lleva 20 años dando clases en la misma jornada.
Las autoridades del Instituto Nocturno Julio Reyes Caballero, ubicado en al colonia La Pradera se encuentran preocupadas porque la deserción en el centro aumentó drásticamente este año.
La inseguridad que impera en la ciudad y la migración de los jóvenes hacia los Estados Unidos han hecho que la población estudiantil bajara.
“De 415 alumnos que se matricularon al inicio, tenemos registrado que 124 han salido del centro”, dijo la directora Silvia Hernández.
La titular del centro pide a la Secretaria de Educación que les ayuden con la creación de una nueva oferta educativa o implementar la jornada diurna en el colegio.
“Nosotros no tenemos presupuesto para crear una nueva carrera, necesitamos apoyo de la Secretaría con la estructura presupuestaria necesaria para la creación de las carreras o para abrir una nueva jornada”, explicó.
Por su parte, los estudiantes realizan visitas a las escuelas para ofrecer a los estudiantes las carreras que tiene el colegio, como parte de su Trabajo Educativo Social.
“Hemos luchado para que no cierre la jornada nocturna, necesitamos apoyo de la Secretaría”, indicó la docente.
El colegio lleva 20 años dando clases en la misma jornada.