Tegucigalpa
La tala y extracción ilegal de madera está provocando una grave pérdida de bosque, especialmente de la caoba, una especie en peligro de extinción.
Según el Instituto de Conservación Forestal (ICF), aproximadamente 700,000 pies tablares de caoba se mueven en el mercado nacional, de los cuales el 89% (620,000 pies tablares) se extraen de forma ilegal. Únicamente se pueden respaldar 80,000 pies tablares que se extraen de las plantaciones certificadas monitoreadas y reguladas por la institución.
La tala ilegal está reduciendo la disponibilidad de caoba en los bosques, y en los últimos 13 años, la cantidad de esta especie ha disminuido en casi un 50%.
“Según los últimos datos del Inventario Nacional Forestal se ha determinado que existe un exterminio definitivo de esta especie, es decir, hay una reducción de la variabilidad y de la densidad de caoba por hectárea y se ha pasado prácticamente de existir un árbol por cada 3.2 hectáreas a un árbol por cada 5.7 hectáreas”, detalló el director del ICF, Luis Soliz. Indicó que usan la misma ruta del tráfico de vida silvestre y droga.
Fue a través del acuerdo 029-2024 que las autoridades del ICF declararon la prohibición de corte de árboles de caoba (de las especies Swietenia macrophylla y Swietenia humilis) por un período de 30 años.
El acuerdo que entró en vigencia el 9 de julio de 2024 al publicarse en el diario La Gaceta establece que la prohibición alcanza no solo la corta de los árboles, sino también el aprovechamiento de los productos y subproductos del mismo, eso con el objetivo de proteger la especie, lograr su reproducción y su subsistencia.
La veda forestal será suspendida hasta el 2054 y es aplicada a todo el territorio hondureño, indistintamente de la naturaleza jurídica del inmueble donde se encuentre la especie proveniente del bosque natural.
Certificados
El acuerdo exceptúa de la prohibición los aprovechamientos amparados en un certificado de plantación aprobado por el ICF.
“Lo que sí no se puede poner en veda son las plantaciones con fines productivos, porque hacen plantaciones para vender caoba, pero esas están certificadas, las tenemos ubicadas y se garantiza la trazabilidad, incluso se puede diferenciar en inspecciones que madera procede de plantaciones certificadas y cuál procede de bosque natural porque tienen diferencias”.
Con la puesta en marcha de la prohibición las autoridades del ICF, en conjunto con la Policía Nacional y el Ejército realizan operativos en carreteras, puestos de venta de madera y talleres donde fabrican muebles para asegurarse que la caoba que tienen fue extraída de plantaciones certificadas.
“Toda madera que sea transportada en carretera va ser decomisada, igual todas las ventas de madera y talleres de mueble deben justificar una procedencia legal”, apuntó Soliz.
