El gobierno de Estados Unidos informó que durante el año fiscal 2015 solamente otorgara 4,000 plazas a Latinoamérica y el Caribe por medio del Programa de Admisión de Refugiados, anunciado recientemente en el convenio compuesto por Honduras, Guatemala y El Salvador.
Esta acción viene por respuesta a los llamados realizados por los tres países centroamericanos exigiendo medidas que detengan la migración infantil.
Para tener un control del caso, el gobierno estadounidense anunció en un comunicado que “un número relativamente pequeño de niños de Centroamérica serán admitidos a Estados Unidos como refugiados en el año fiscal 2015”.
La cantidad de estas plazas es justificada porque es producto del inicio tardío del programa (diciembre) para la región y la cantidad de tiempo que se necesita procesar para la admisión de refugiados a Estados Unidos.
El beneficio que este programa tiene es para los padres que viven legalmente en Estados Unidos puedan solicitar a sus hijos en carácter de refugiados, siempre y cuando se demuestre que su estado es de riesgo social.
Por otra parte esto tiene límites para los que residente ilegalmente en ese país, representando casi la totalidad de los menores detenidos en la frontera en el presente año.
El embajador de Honduras en Washington, Jorge Milla, informó que 'la cuota no es tan grande pero se ha anunciado que se dará prioridad a los casos de la región del triángulo norte de Centroamérica”.