Una misión del Fondo Monetario Internacional, FMI, exigió este jueves al gobierno hondureño de Manuel Zelaya que mejore la recaudación de impuestos y disminuya el gasto público, al finalizar una evaluación del programa de condonación de la deuda externa a este país centroamericano.
En comunicado, la misión advirtió de 'la necesidad de fortalecer los ingresos tributarios, controlar el gasto público y reorientarlo hacia las áreas proritarias, y aumentar la eficiencia de las empresas públicas de teléfono y de electricidad'.
La misión del FMI, encabezada por Luis Breuer, dio a conocer el comunicado, tras concluir la evaluación de la administración de Zelaya que comenzó el 27 de enero pasado.
Los representantes del organismo reconocieron que la economía hondureña 'ha tenido un buen desempeño durante este año, que se ha beneficiado de condiciones externas favorables'.
'En el 2006 se prevé que el crecimiento será superior al 5% debido al mayor consumo y al fuerte crecimiento de los sectores de la construcción, financiero y del café', destacó.
Asimismo, reconoció los esfuerzos del gobierno que han conducido a bajar la inflación en menos del 5% con el apoyo de la estabilidad del tipo de cambio y la abundante oferta agrícola.
En tanto, 'las reservas internacionales netas aumentaron en el primer semestre debido principalmente al fuerte crecimiento de las remesas familiares y se han estabilizado en alrededor de 2.300 millones de dólares', resaltó el orgamismo.
No obstante, lamentó que 'en 2006 se prevé que el déficit fiscal aumentará ligeramente en alrededor del 2% del Producto Interno Bruto, como resultado de un debilitamiento de las finanzas de las empresas públicas, de mayores gastos y subsidios y del aumento de préstamos de un fondo de pensiones'.
Honduras negocia un nuevo acuerdo con el FMI para mantener la condonación de 2.485 millones de dólares de deuda ya concretados con el Club de París y el grupo de países industrializados (G-8) y materializar un nuevo alivio con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), que la semana pasada prometió condonar entre 800 y 1.400 millones de dólares de deuda.
Sin los alivios, la deuda externa de Honduras se estima en 5.200 millones de dólares.
El dinero que se ahorra en el pago de la deuda externa, Honduras debe aplicarlo en la Estrategia de Reducción de la Pobreza (ERP) que obliga al gobierno a reducir en 24 puntos, en los próximos 15 años, ese flagelo que afecta a cerca del 70% de los 7 millones de hondureños.