27/04/2024
12:50 AM

Pasó 60 días durmiendo en una acera del Hospital Rivas por su bebé

Decenas de familiares de pacientes relatan el sufrimiento que viven por tener que dormir sobre cartones en las aceras del Mario Rivas, esperando noticias de sus seres queridos

San Pedro Sula, Honduras

'Tuve una bebé que nació antes de cumplir los seis meses de gestación en un taxi. Venía referida del hospital de Tela hacia el Mario Catarino Rivas cuando parí. Pasé dos meses durmiendo a la intemperie', dijo María López, un joven ama de casa que al igual que decenas de personas que vienen del interior del país se ven obligados a pasar las frías noches en las aceras de este centro asistencial de la zona norte.

López cuidaba con recelo un pedazo de cartón que le servía como colchón, mientras esperaba que su bebé se recuperara y pudiera salir de la sala de Neonatos donde se encontraba ingresada.

Afirmó que es una terrible odisea tener que pasar las noches en estas condiciones, 'pidiéndole a Dios que no lloviera para no mojarme'.

Su bebé apenas pesó 380 gramos y tenía pocas expectativas de vida, 'los médicos me decían que solo un milagro podría salvar a mi niña'.

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Aunque en el Mario Rivas funciona un albergue, administrado por la Fundación Abrigo, el cual cuenta con una capacidad para 160 personas, según López no pudo aprovechar ese beneficio ya que debía estar pendiente de cualquier llamado.

'No pude quedarme en el albergue porque mi bebé estaba muy delicada y debía estar pendiente de ella, además, ahí no hay espacio para más gente y cierran las puertas a las 7:00 pm', comentó.

Contó que varias noches tuvo que salir corriendo a resguardarse de la lluvia y el frío. Sin embargo, afirmó que la mayor lucha la tuvo su hija, a quien llamará Kiara Isabella. 'Ella ha tuvo que aferrarse a este mundo', contó acongojada.

Cinthia Argueta, originaria del departamento de Lempira, con apenas seis días de haber parido por cesárea, también pasó varias incómodas noches durmiendo en una silla plástica, cerca de la sala de Neonatos a la espera de noticias de su bebé, quien nació con complicaciones y por eso no había sido dado de alta.

Estos son tan solo algunos de las decenas de casos de familiares de pacientes que viven un martirio en el principal centro asistencial del país.

Los árboles sirven de techo y las aceras como cama para estos hondureños. Algunos han instalado hamacas para poder dormir con mayor comodidad. Entre todos se cuidan las pertenencias y se apoyan en los momento más difíciles.

Y aunque, la mayoría no se queja de la atención que ha recibido por parte de los médicos, sí afirman que el hospital debe tener un nuevo albergue, con más espacio y más flexibilidad en los horarios de salida sobre todo para aquellos que tienen a sus bebés internados en condiciones muy delicadas.

Sobre el albergue...

Según las autoridades del centro asistencial este beneficio es gratuito y las personas pueden gozar de tres tiempos de comida. Cuenta con una capilla y un salón de entretenimiento.

'Lo único que se les pide es que, mientras estén ahí, colaboren con el aseo del lugar. Cosa que no todos quieren hacer, pero que es necesario para que convivan en un espacio limpio', dijo Julia Sánchez, vocera del Rivas.

Sánchez agregó que los horarios del albergue son de 6:00 am a 7:00 pm. 'Por lo general, siempre hay espacio, pero hay algunos días en que hay más personas, como por ejemplo los lunes y los fines de mes', comentó.