La exmodelo Ilsa Vanessa Molina desea someterse voluntariamente a la justicia para responder por los cargos que le imputan por actos de corrupción en el Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS).
El Ministerio Público le imputa el delito de lavado de activos, incoado a inicios de este mes.
En el grupo de acusados figura el nombre de la expalillona Ilsa Molina, contra quien el Juzgado Penal libró una orden de captura nacional e internacional.
Su defensa asegura que no será necesaria su aprehensión, ya que desea presentarse voluntariamente a los tribunales.
“Ilsa Vanessa ha tenido contacto conmigo, ella se encuentra en toda la disponibilidad de enfrentar a la justicia hondureña, siempre que se le garantice un debido proceso y las demás garantías establecidas en la Constitución de la República y el Código Procesal Penal”, informó su abogado Héctor Durán.
Recordó que desde un inicio su representada tuvo la anuencia de presentarse ante las autoridades.
Solo espera que el Ministerio Público concluya unas diligencias investigativas en beneficio de su defensa, para presentarla a los tribunales.
Trascendió que Ilsa Molina viajó fuera del país.
En este caso, dijo que no había ninguna prohibición de salir del país antes que el Juzgado emitiera la alerta migratoria.
Junto con Ilsa Molina, la Fiscalía acusó al exdirector del IHSS Mario Zelaya y el exjefe administrativo José Bertetty.
Además, acusa por lavado de activos a los esposos José Zelaya, exsubgerente de Compras del IHSS, y Michelle Rojas, recién capturada. Son acusados por un millonario desfalco al IHSS mediante utilización de empresas fantasmas.
Fantasma
Molina Aguirre es acusada por el presunto delito de lavado de activos, luego que bajo la empresa Insumos Médicos (Insumedic) obtuvo cheques a su favor por un monto de 9.2 millones de lempiras. Según las investigaciones, Insumedic no entregó los materiales; pero Molina asegura que sí.
Por los actos irregulares en el IHSS, la Fiscalía investiga a unas 400 personas, de las cuales al menos 300 están vinculadas a la línea de las empresas fantasmas.
Ilsa Molina fue compañera sentimental de José Zelaya, padre de su hijo, quien se encuentra prófugo de la justicia.