Desde las 6:00 am de ayer, los pacientes del hospital público de El Progreso se quedaron sin atención de las enfermeras que se fueron a un paro de labores exigiendo a Salud la compra de uniformes.
De las 102 mujeres de blanco que laboran en el centro asistencial, 70 son permanentes, el resto por contrato y servicio social. En labor y parto solo participan las primeras.
“El Gobierno nos está quitando un derecho que hemos ganado como gremio, si no nos resuelven a nivel central seguiremos de manera indefinida en la suspensión de labores”, expresó Verónica Martínez, presidenta de la Asociación de Enfermeras del Hospital de El Progreso.
Ante la situación y para evitar que la salud de algunos pacientes se complique, la directora del centro, Maritza Varela, logró que las 32 enfermeras en servicio social y de contrato se mantengan en las salas más críticas atendiendo a la población que llega en busca de salud.
Martínez agregó que hasta ayer el problema solo se presentaba en el hospital progreseño, pero creen que lo mismo va a ocurrir en el resto de sanatorios del país.
La dirigente expresó que junto a la acción también están exigiendo mayor respuesta a las autoridades del Gobierno en el abastecimiento de medicamentos y personal para ese establecimiento, “la población ya no debe seguir sufriendo por escasez”.
Maritza Varela, directora del hospital de El Progreso, dijo que lamentablemente con el recorte en el presupuesto no solo se afecta a las enfermeras, si no a varias áreas de atención que carecen de personal y de medicamento.
“Hacemos las gestiones ante Salud para que se solvente el impasse”.