Tegucigalpa, Honduras.
Las protestas y el caos volvieron a interrumpir parcialmente las actividades académicas en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (Unah) en la capital.
Frente a las instalaciones de la ciudad universitaria se volvió a presentar una batalla campal. Los protagonistas fueron supuestos estudiantes encapuchados que se enfrentaron a policías antimotines.
En horas de la mañana todo transcurrió con normalidad, pero al mediodía paralizaron el tráfico y se tomaron las calles del bulevar Suyapa.
Los encapuchados protestaron en la conmemoración del tercer año del asesinato de la ambientalista Berta Cáceres, ya que según ellos no ha existido justicia pese a que hay siete condenados por el crimen.
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Cáceres fue asesinada el 2 de marzo de 2016 en su residencia en La Esperanza, Intibucá.
Los supuestos estudiantes detuvieron un carro pick-up de un medio de comunicación televisivo y le quitaron las cajas que llevaba en la paila. Eran cajas llenas de casetes del medio de comunicación que ya no tenían utilidad y las llevaban al crematorio. Luego les prendieron fuego, provocando temor a los pocos transeúntes.
Posteriormente, el aire de la zona se llenó de humo porque en el enfrentamiento los policías lanzaron bombas de gas lacrimógeno para disolver la protesta.
A su vez, los encapuchados lanzaron bombas molotov contra los uniformados.
En el interior las clases se desarrollaban con normalidad, pero muchos estudiantes no podían ingresar al campus.
