En cubículos divididos con biombos, cortinas y viejos escritorios son atendidos más de 80 pacientes que llegan todos los días al centro de salud del municipio de Omoa en busca de atención médica.
Las condiciones son precarias, en las instalaciones no hay ni muebles para guardar la documentación y algunos son colocados en cajas de cartón.
Este centro de salud funciona donde antes estaba un comedor infantil propiedad de la Alcaldía, ya que el edificio se dañó desde el terremoto del 28 de mayo de 2009 y aún no se ha logrado hacer una nueva instalación.
Germán López, coordinador Técnico en Salud Ambiental, lamentó que debido a que el espacio es muy reducido los pacientes tienen que esperar su turno en las afueras, bajo las inclemencias del clima.
López aseguró que las autoridades de la Secretaría de Salud conocen la necesidad en el centro, pero no han hecho nada para solventarlo.
“Hacemos un llamado a las autoridades del Gobierno para que nos puedan facilitar la construcción del centro de salud y que podamos brindar una atención de calidad al paciente”.
Bodega
En el área del consultorio están apiñadas todas las puertas que habían en el viejo edificio, las cuales son utilizadas para cubrir el espacio de los ventanales. La clínica de odontología también funciona en condición crítica, en un espacio donde solo cabe una pequeña silla donde es colocado el paciente mientras trabaja el odontólogo.
En este mismo local están ubicadas las oficinas de la coordinación del área de salud del municipio.
El médico Luis Alonso Rodríguez lamenta el descuido de las autoridades superiores, ya que tres años después no han logrado hacer nada para reparar o construir un nuevo centro.
“El paciente merece privacidad donde se le pueda dar una atención adecuada”.
Aseveró que existe la demanda, por lo que se necesita más personal y recursos para dar una mejor cobertura asistencial.
Ricardo Alvarado, alcalde de Omoa, explicó que con fondos municipales se preparó el terreno donde se hará la construcción del centro y la Secretaría de Salud tiene el compromiso de iniciarla; sin embargo, continúan a la espera.
“En una bodega municipal está funcionando el centro de salud, es un desastre total”. Indicó también que son seis millones de lempiras los que se necesitan para la construcción de un nuevo edificio.