Chiapas. Apenas empieza a vivir y ya sabe lo que es irse por la peligrosa y mortal ruta de los “mojados”.
A medio vestir, descalzo y solo fue encontrado un niño hondureño de tres años de edad en los patios de maniobras del ferrocarril del istmo de Tehuantepec, en la ciudad de Arriaga, Chiapas.
Jorge Antonio Arce, empleado de una tienda de pinturas, salvó al niño, que iba a ser atropellado. Al preguntarle por su madre, el menor de edad le respondió que se había ido en el tren y que quería regresar a Honduras.
El menor de edad, identificado como Gerardo, fue trasladado a las coordinaciones de Protección Civil y Protección Ciudadana del Ayuntamiento de Arriaga, por lo que de inmediato se organizó un operativo de búsqueda para dar con la madre o alguno de sus familiares.
El menor de edad fue trasladado al Sistema Nacional de Desarrollo Integral de la Familia y posteriormente trasladado a la Fiscalía Especializada en Delitos Cometidos contra Migrantes, pero al no existir constancia de su nacionalidad no fue recibido.
Minutos más tarde llegaron dos mujeres, quienes aseguraron que la madre del menor se lo había dejado para que lo cuidaran.
Ellas presentaron una inscripción de nacimiento de Honduras en la que se establece que es originario de Ocotepeque, con el nombre de Luis Gerardo Dubón García y fecha 14 de junio de 2010.
De acuerdo con el documento, la madre del menor es Irma Leticia Dubón García, originaria de El Paraíso, Copán. Sin embargo no les fue entregado el menor de edad por los procedimientos legales y además el niño no quería irse con ninguna de las dos.
