Por falta de dinero y de personal docente calificado, Honduras está lejos de implementar la educación bilingüe y computacional en todos los centros educativos públicos.
Ese objetivo fue trazado en las metas de la Ley Fundamental de Educación, aprobada desde inicios del año anterior.
Dennis Cáceres, director de la Calidad Educativa de la Secretaría de Educación, dijo: “Aplicar todo ese sistema en un solo año no es posible, porque el Gobierno no tiene capacidad; no tenemos profesores de inglés, por ejemplo”.
Cáceres agregó que es imperativo que esos programas de enseñanza arranquen.
“Lo importante es comenzar y dejar establecido que el país va para allá, en un plan nacional”, recomendó Cáceres.
El director considera de vital importancia esos proyectos porque esas áreas de trabajo hacen que los nuevos profesionales sean más competitivos y completos en un mundo globalizado donde una persona que no habla inglés ni sabe computación pierde oportunidades de empleo.
Con base en lo que plantea la Ley Fundamental de Educación, el sistema necesita 5,000 docentes, en 10 años, que enseñen ese idioma, 500 por año, analizó Marlon Brevé, exministro de Educación.
El Estado no ha sido capaz de abrir nuevas plazas en los últimos cuatro años.
Las únicas plazas que se abrirán en 2013 son 500 que serán destinadas a los pueblos indígenas, afrodescendientes y misquitos para que impartan clases en la lengua materna de esas poblaciones, dijo Marlon Escoto, ministro de Educación.
Metas sin alcanzar
La ampliación de coberturas escolares es otro aspecto que se menciona en la Ley Fundamental de Educación y que también está lejos de cumplirse en los plazos fijados.
Para el caso se ha planteado que en educación media se debe ampliar la cobertura de séptimo a noveno grado de 45 a 100% y los bachilleratos de 28 a 100%.
Para eso se necesitan 15 mil plazas más, o sea adicionales a las 5,000 de inglés, en un plazo de 10 años, apuntó Brevé.
Es decir que el Gobierno debe abrir 2,000 plazas nuevas cada año desde 2013 hasta 2023, pero eso a todas luces no es posible, ni factible.