Un líder de la iglesia Bautista del Sur que pide a los cristianos evitar el yoga y sus nexos espirituales está recibiendo el rechazo de muchos que defienden esa antigua disciplina.
El presidente del Seminario Bautista del Sur, Albert Mohler, dijo que la disciplina de estiramientos y meditación derivada de las religiones orientales no es un camino cristiano para llegar a Dios.
Mohler dijo que se opone a 'la idea de que el cuerpo es un vehículo para alcanzar el conocimiento de lo divino'.
'Eso no es cristianismo', manifestó el líder religioso a The Associated Press. Mohler ha recibido retroalimentación por correo electrónico y comentarios en blogs y otros sitios de internet desde que escribió un ensayo para dar respuesta a las interrogantes que ha escuchado acerca del yoga durante años.
'Estoy muy sorprendido por la profundidad del compromiso con el yoga que he hallado en muchos que se identifican como cristianos', dijo Mohler.
Un estudio del 2008 realizado por la revista Yoga Journal encontró que alrededor de 15,8 millones de estadounidenses practican esta disciplina originaria de la India, casi 7% de los adultos.
Mohler argumentó en su ensayo el mes pasado que los cristianos que la practican 'deben negar la realidad de lo que representa el yoga o no ven las contradicciones entre su devoción cristiana y su gusto por el yoga'.
Dijo que su punto de vista 'no es una posición cristiana excéntrica'.
Otros líderes cristianos han dicho que practicar yoga es incompatible con las enseñanzas de Jesús. El pastor John MacArthur, de California, calificó a esta disciplina como una 'falsa religión'. Los clérigos musulmanes han prohibido a sus fieles practicarla en Egipto, Malasia e Indonesia, por razones similares.
Los defensores del yoga argumentan que ésta ofrece sanación física y mental mediante poses de estiramiento y concentración. Y algunos sitios donde se practica yoga han retirado los cánticos y las asociaciones a las religiones orientales, el hinduismo básicamente, con el fin de hacerlo más aceptable para los cristianos.
Stephanie Dillon, quien dirige un estudio de yoga, dijo que la disciplina la acercó más a su fe cristiana. 'Abrió mi espíritu y renovó mi espiritualidad', dijo.
'No me gusta ver a la religión desde un punto de vista legal, sino como una relación, una relación con Jesucristo', agregó.
