18/04/2024
09:26 AM

Doña Marina, 50 años dando refugio a los damnificados

Marina Martínez llegó a la ciudad en compañía de su familia, con quienes trabaja brindando transporte en su lancha a las personas que viven en los ex campos bananeros. Foto: NEPTALÍ ROMERO.

San Pedro Sula, Honduras.

A bordo de su patrimonio familiar, una lancha que data desde la Tela Railroad Company, doña Marina Martínez llegó ayer desde el Campo Las Flores hasta la orilla del río Ulúa en El Progreso, Yoro. La mujer, de 77 años, se trasladó a la ciudad con el propósito de abastecerse de combustible y alimentos para poder seguir ayudando a las cerca de 20 personas que tiene albergadas en su hogar.

En tierra firme, su familia la esperaba para acompañarla ha hacer las compras, mismas que pagan de sus propios bolsillos. Con una sonrisa cálida y sus ojos llenos de esperanza, doña Marina compartió con Diario LA PRENSA que llegó al sector de los ex campos bananeros en 1972, donde se estableció en una casa a las orillas del Ulúa, la cual nunca se ha inundado.

La campeña manifestó que esto también fue posible gracias al apoyo de personas de noble corazón que se sumaron a la causa y enviaban alimentos en lanchas desde El Progreso.

Esto le ha permitido poder ofrecer refugio a sus vecinos desde hace 50 años, pasando por los huracanes Fifi y Mitch, que azotaron duramente a Honduras en los años 1974 y 1998, respectivamente.

Ejemplar

A finales de 2020, cuando las tormentas Eta y Iota causaron estragos en toda la zona, Martínez y su familia brindaron un techo, ropa y comida a más de 300 personas que perdieron todo debido a las inundaciones.

La campeña manifestó que esto también fue posible gracias al apoyo de personas de noble corazón que se sumaron a la causa y enviaban alimentos en lanchas desde El Progreso. “Por la gracia de Dios mi casa nunca se ha inundado y ha servido de refugio para todo aquel que lo necesite durante las llenas”, expresó.

Asimismo, compartió que en el campo Las Flores el agua que se filtró por las fisuras de los bordos ya les llega al pecho y cientos de familias han perdido sus bienes, reviviendo la pesadilla de hace dos años. Doña Marina también se vio afectada, perdió su plantación de plátanos la semana pasa debido a las fuertes lluvias, pero confía en que podrá recuperarse pronto y luego de finalizar sus compras, regresó a casa para preparar la cena con la ayuda de su nuera.

El héroe de 73 años que ha rescatado a más de 200 personas

Juan Garmendia es un poblador de Naranjo Chino, de 73 años, quien junto a su fiel compañera, una lancha de motor que conserva desde hace muchos años, ha logrado rescatar a más de 200 personas de los ex campos bananeros desde las tormentas tropicales Eta y Iota.

Garmendia compartió con La Prensa que posee varias lanchas y cada vez que las llenas amenazan a este sector, acompaña a los cuerpos de socorro en las labores de evacuación y rescate.

“Me gusta servir a la gente, a veces uno siembra aquí para cosechar en el cielo”, señaló.

La semana pasada, al escuchar de la alerta roja y la crecida del río Ulúa, don Juan, como lo llaman sus vecinos, comenzó a organizar un grupo de colaboradores, con quienes ha logrado poner a salvo a decenas de familias.

Este grupo trabaja sin descanso desde hace cuatros días. Según explicó Garmendia, ayudan a las personas a salir del sector de los excampos y a su regreso llevan agua, combustible y alimentos para quienes se rehúsan a abandonar sus hogares por temor a perder los pocos bienes que les quedan.

Consultado acerca de qué lo ha motivado a brindar una mano amiga, el campeño manifestó que poder ayudar lo hace feliz. “Me gusta servir a la gente, a veces uno siembra aquí para cosechar en el cielo”, señaló.