Aunque hay comunidades incomunicadas, la tranquilidad retornó a esta región luego de horas de angustia por el huracán Félix, que a su paso dejó fuertes lluvias y actividad eléctrica.
Las fuertes lluvias que cayeron ayer en la noche dejaron derrumbes en algunas comunidades sin que se hayan reportado víctimas. La comunidad de El Paraíso se encuentra incomunicada debido a un deslave. Lenin Gonzales, regidor municipal, manifestó que están buscando la forma para que a través del Programa Mundial de Alimentos se suministren provisiones a más de 80 familias.
Mientras la normalidad retorna poco a poco, muchas familias regresaron a sus hogares luego de permanecer en albergues ante la amenazas que se pronosticaban con el paso de este fenómeno. Las más de 400 personas evacuadas fueron trasladas ayer en horas de la tarde de la misma manera de la que fueron sacados de sus viviendas.
En el municipio de Ahuás en el departamento de Gracias a Dios, la situación de más de 600 personas, en su mayoría niños, es crítica, 'sólo se les fue a evacuar y no se les dio alimentación ni frazadas y hay mucha necesidad en este momento', dijo Dina de Torres, una de las afectadas, a la Radio Católica de Trujillo. Los evacuado son de Wawina, Barra Patuca, Warunta, Wasma y Atalaya. Las actividades gubernamentales y comerciales volvieron a la normalidad.