La Comisión de Transición de los Centros Penales de Honduras asumió hoy el mando total de las cárceles del país para solucionar los problemas de infraestructura, sobrepoblación y hacinamiento, informaron fuentes oficiales.
El ministro hondureño del Interior, Áfrico Madrid, dijo a periodistas que a partir de hoy la Comisión de Transición, que coordina el jurista José Ávila, ha asumido la administración del sistema penitenciario del país.
'Con este proceso de transición se busca mejorar las condiciones humanas de los internos y de los sistemas de reinserción y formación de los presos', explicó.
En las cárceles hondureñas impera la sobrepoblación y el hacinamiento, la falta de instalaciones físicas adecuadas y seguras para el alojamiento de los reclusos, las condiciones de higiene y salubridad son deplorables, según un diagnóstico presentado en abril de 2012 por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
El coordinador de la Comisión de Transición declaró a periodistas que en febrero de 2015 harán el traspaso administrativo de las cárceles al Instituto Nacional Penitenciario, creado en 2012 por el Parlamento hondureño.
'Tenemos una tarea dura, es preocupante, por eso estamos pidiendo ayuda a organismos internacionales y a nuestro Gobierno para salir adelante con este problema de país', dijo Ávila, durante el acto de traspaso que se celebró en la Penitenciaria Nacional, unos 25 kilómetros al norte de Tegucigalpa.
Además de Ávila, la Comisión de Transición la integran los abogados Servando Alcerro y Delmy Banegas.
Los miembros de la Comisión nombraron hoy al exdirector de Asuntos Internos de la Secretaría de Seguridad, comisionado Santos Flores, como director interino de los centros penales, que albergan a más de 13.000 personas cuando su capacidad es para unas 8.000, según diversos organismos.
Los casos de tiroteos, motines, decomiso de armas y droga en las cárceles de Honduras son frecuentes, donde también en el último año murieron más de 370 presos.
El 14 de febrero de 2012, en la Granja Penal de Comayagua murieron en un incendio 360 presos y una mujer que visitaba a su marido, y otros 13 reclusos fallecieron en el presidio de San Pedro Sula el 29 de marzo de ese mismo año. EFE