Son inmuebles conformados por pequeños locales donde hay tiendas, farmacias, bancos, librerías, cafés, ciber cafés, tiendas de video, lavanderías, alguna comida rápida y panaderías.
En Estados Unidos son conocidos como 'Community Mall' o malles comunitarios y en la capital industrial se están poniendo de moda con diferentes nombres.
Su concepto no es vertical como los tradicionales edificios comerciales sino horizontal y con amplios parqueos. Los arquitectos y los encargados de otorgar permisos de construcción en San Pedro Sula les llaman a este tipo de estructuras 'centros comerciales abiertos' o 'plazas comerciales'.
Los sitios son como pequeños malles pero abiertos y con accesos cómodos y alquileres más bajos, dice Rosina Ochoa, quien renta un local en una plaza comercial. En la ciudad los centros comerciales abiertos han aumentado y según los registros de la oficina de permisos de construcción, se empezaron a edificar arriba de la circunvalación.
Al alcance de todos
La jefa de permisos de construcción María del Carmen Mejía dice que se han aprobado varios planos para esas construcciones y hay en funcionamiento unos 30 centros comerciales de ese tipo en la ciudad.
'Arriba de la circunvalación hay unas ocho plazas, la mayoría en el barrio Río de Piedras'.
Mejía dice que los inversionistas optan por ese tipo de construcciones por la comodidad para el cliente, cercanía con las residenciales y poder rentar un local para tiendas o restaurantes a un precio no tan elevado.
Las personas que acuden a estos negocios consideran que es una modalidad cómoda porque hay parqueo suficiente y más variedad. 'Podemos tomarnos un café tranquilamente en un lugar cómodo', dice el sampedrano Pablo Ulloa.
La jefa de urbanismo Fabricia Hernández explica que las plazas comerciales se han desarrollado como una forma de juntar, en un espacio cómodo, varios servicios para la ciudadanía. 'Son negocios pequeños que para atraer mayor número de clientes se asocian con una tienda ancla o un área de comida rápida para poder desarrollarse'.
La arquitecta dice que estas edificaciones mejoran la imagen urbana a la ciudad porque sus negocios tienen áreas verdes, fuentes y otros atractivos que dan un toque de modernismo y atracción. Estos centros comerciales son más dirigidos al público local, son más domésticos porque se construyen más cerca de las colonias, residenciales y barrios con el fin de que los vecinos no tengan que acudir a un centro comercial grande.
'Las plazas ofrecen servicios para uso más cotidiano ya que hay lavanderías, tiendas de útiles escolares, de regalos o de ropa', indicó la arquitecta.
De la mano con el desarrollo
El presidente de la Cámara de la Construcción, William Hall, detalla que este tipo de construcciones surgen cuando las ciudades se desarrollan. 'El centro de la ciudad poco a poco ha perdido su atractivo para que las personas lo visiten, por razones de inseguridad y otras situaciones'.
Por ello han surgido varias plazas que son pequeños centros comerciales comunitarios porque prestan servicio a colonias y barrios aledaños. 'Lo que hay en estos inmuebles son un restaurante, farmacia, un banco, una lavandería y algunas tiendas que prestan algún servicio específico'.
La particularidad de estos centros comerciales es la prestación de servicios a las colonias aledañas, son de fácil acceso, explicó.
El presidente de la Chico dice que el crecimiento de la inversión privada en la ciudad ha sido muy importante especialmente en el noroeste de la ciudad donde hay universidades, supermercados y centros comerciales grandes.
Indicó que los centros comerciales abiertos son lugares apropiados para sucursales de bancos, heladerías, comidas rápidas, compañías de cables o tiendas de video.
